Los increíbles hallazgos en el Gran Agujero Azul del Caribe, uno de los lugares más enigmáticos del mundo
February 19, 2019 Misterios , NoticiasUn equipo de científicos viajó hasta allí. Capturaron imágenes y lograron elaborar un mapa tridimensional.
Un grupo de científicos e investigadores exploraron las profundidades de uno de los lugares más misteriosos del océano: el Gran Agujero Azul de Belice, país ubicado en la zona del Caribe. Allí, hicieron increíbles hallazgos científicos que prometen sorprender al mundo.
El Gran Agujero Azul es el sumidero más grande y profundo del mundo, con 300 metros de diámetro y unos 125 de profundidad. Este lugar se encuentra cerca del arrecife Lighthouse, un atolón a unos 100 kilómetros de la costa de Belice.
La expedición fue liderada por el magnate de negocios británico Richard Branson, y Fabien Cousteau, nieto de Jacques Cousteau, un investigador que estudió el mar y varias formas de vida conocidas en el agua. Jacques fue justamente uno de los primeros en poner al gran sumidero en el mapa.
El grupo llegó al lugar el pasado diciembre con el fin de descubrir los grandes misterios del Gran Agujero Azul. Usando dos submarinos, capturaron imágenes y lograron elaborar un mapa tridimensional de su interior, informó CNN.
Erika Bergman, oceanógrafa y jefa de operaciones, quien fue parte de la expedición, dijo que uno de los hallazgos más importantes fueron las estalactitas, un tipo de mineral en forma de carámbanos (pedazo de hielo en forma de cono que se forma cuando el agua que gotea de un objeto se congela por efecto de la helada).
“Eso fue bastante emocionante, porque no se mapearon allí antes, no se había descubierto nada por la zona. Una de las cosas extrañas del agujero es la capa de sulfuro de hidrógeno“, sostuvo Bergman, y agregó que la experiencia “fue alucinante”.
Por otro lado, contó que mientras más se sumergían en el agujero, la luz se cortaba y los buzos quedan en la oscuridad: “Se pierde toda la luz solar y se vuelve todo negro. Allí es totalmente anóxico, sin absolutamente ninguna vida”. Pero gracias al sonar de alta resolución, la expedición pudo ver las curiosas y asombrosas características del agujero.
“Podés estar a 20 o 30 metros de distancia de una estalactita o un trozo de la pared y verla con todos los detalles perfectos, mejor de lo que la vista podría proporcionar”, explicó la investigadora.
Algunas cosas que encontraron en el agujero no se pudieron identificar y todavía no fueron sometidas a un análisis, como unas huellas en el fondo. Por lo tanto, “están abiertas las interpretación” hasta que lo resuelvan.
Una de las conclusiones más alentadoras es que el impacto humano fue casi mínimo, ya que el agujero está casi libre de basura. “Básicamente había dos o tres pequeñas piezas de plástico, y aparte de eso, fue muy, muy claro”, dice Bergman.
Y añadió: “Es bueno que haya espacios en nuestro planeta, y la mayoría de ellos en los océanos, que son exactamente como eran hace miles de años y seguirán siendo exactamente como son miles de años en el futuro”.