Un grupo de investigadores de la Universidad de Tokio, en Japón, ha logrado identificar marcadores específicos que indican el inicio de una nueva era geológica, conocida como el Antropoceno. Aunque nuestro período de la historia se conoce ampliamente como el Holoceno, que se remonta a unos 12.000 años atrás, el impacto sin precedentes de la humanidad en la Tierra desde la Revolución Industrial y, particularmente, desde mediados del siglo XX, ha provocado que los investigadores busquen crear una nueva definición precisa para esta era posnuclear.
Un nuevo escenario: la “era de la humanidad”
De esta forma, el Antropoceno es el nombre que algunos científicos dan a la era geológica actual, marcada por el momento en que la actividad humana comenzó a tener un impacto significativo en la geología y los ecosistemas de la Tierra. De acuerdo a una nota de prensa, por primera vez se ha obtenido una definición cuantitativa fuerte y precisa para el comienzo de esta era, que desgraciadamente no parece traer buenas noticias para la “salud” de nuestro planeta.
En el marco del nuevo estudio, publicado recientemente en la revista Scientific Reports, los investigadores liderados por Yusuke Yokoyama combinaron registros de precipitaciones nucleares de pruebas atómicas halladas en sedimentos oceánicos y esqueletos de coral, obtenidos en la zona de la Bahía de Beppu, en el área noroeste del Océano Pacífico y frente a la costa de Japón. Estos registros muestran un claro cambio en el entorno oceánico antes, durante y después de un período de pruebas atómicas en todo el mundo, que los investigadores han definido como el comienzo del Antropoceno.
El plutonio como evidencia
En base a los datos recopilados, el equipo de investigación propone que la época del Antropoceno comenzó en 1954. ¿Por qué? Se sabe que el plutonio (Pu) se ha utilizado como marcador temporal de los cambios ocurridos sobre mediados del siglo XX en varios archivos geológicos, como resultado de las pruebas nucleares atmosféricas realizadas principalmente en la década de 1950.
Los registros sedimentarios analizados en la nueva investigación muestran un claro aumento de plutonio desde 1950, alcanzando su punto máximo durante la década de 1960 y luego mostrando una fuerte disminución durante la década de 1970. Sin embargo, una proporción de isótopos constantemente más alta sugiere una contribución adicional, además de la lluvia radiactiva global, a través de las corrientes oceánicas.