Una enmienda puede dar paso a la revelación UAP

El Congreso pondrá en marcha una enmienda para revelar “tecnologías recuperadas de origen desconocido” y evidencias biológicas de “inteligencia no humana”

Disclosure inminente

Hemos dicho tantas veces “que viene el lobo” que, seguramente, cuando venga, nadie nos creerá. Viene a cuento tras el anuncio de que el próximo 26 de julio el Comité de Supervisión de la Cámara de representantes de los Estados Unidos llevará a cabo una audiencia sobre los UAP -la enésima- que podría cambiar las reglas del encubrimiento gubernamental.

Lo ha hecho público, desde su cuenta de Twitter, el senador republicano Tim Burchett quien está convencido de que Estados Unidos ha recuperado naves de origen no humano y ha desarrollado tecnología inversa a través de contratistas privados. El senador hace meses que denuncia públicamente estas sospechas y quiere llegar al fondo de problema de los UAP, acrónimo de Fenómenos Anómalos no Identificados, aprovechando una enmienda a la ley de Autorización de Defensa Nacional (NDAA) que fue presentada el pasado viernes 14 de julio de 2023.

El líder de la mayoría del senador Chuck Schumer y el senador republicano Mike Rounds, ha sabido concitar el interés bipartidista, para realizar una enmienda a la NDAA que obligaría a la divulgación de información sobre UAPs. Su proposición de ley, de 64 páginas, sigue el modelo de una ley estadounidense de 1992 que detalla el manejo de los registros relacionados con el asesinato del presidente John Kennedy en 1963. En consecuencia, la Administración Nacional de Archivos y Registros crearía una colección de informes relacionados con los ovnis para su publicación pública inmediata, a menos que una junta de revisión lo considere necesario para que un registro determinado se mantenga clasificado.

Una investigación del Congreso sugiere que las empresas privadas estadounidenses tienen tecnologías de origen desconocido 

El líder de la mayoría del senado Chuck Schumer

Según el líder de la mayoría del Senado, Chuck Schumer, una amplia investigación del Congreso descubrió una “amplia red” de denunciantes de ovnis que sugieren que las empresas privadas poseen “tecnologías de origen desconocido” y “evidencia biológica de inteligencia no humana“.

Este término –empleado por el denunciante David C. Grush– aparece un total de 22 veces en la llamada “Ley de divulgación de fenómenos anómalos no identificados de 2023” presentada el 13 de julio por el citado senador.

Definiciones

Según Liberation Times, el personal de Schumer y otros senadores han estado en coordinación con amplios sectores del gobierno, incluida la Casa Blanca y su Consejo de Seguridad Nacional para crear el lenguaje apropiado.

De acuerdo con esta legislación, la “inteligencia no humana” es “cualquier forma de vida no humana inteligente sensible, independientemente de la naturaleza o el origen último que pueda ser presuntamente responsable de los Fenómenos Anómalos No Identificados (UAP)”. No se podrá decir, a partir de ahora, que no se sabe bien de lo que se habla. Blanco y en botella… leche.

De hecho, la Enmienda de Divulgación UAP busca establecer un proceso para documentar UAP basado en las “cinco observables” que definió Lue Elizondo y uno más relacionado con los efectos físicos adversos sobre los testigos de encuentros cercanos. A saber:

1) Aceleración repentina e instantánea
2) 
Hipervelocidad
3) Transmedio (puede viajar sin esfuerzo a través de múltiples medios, incluidos el agua, el aire y el espacio exterior
4) Ascenso positivo contrario a los principios aerodinámicos (antigravedad)
5) Sigilo
 (esquivar el radar)
6) Efectos físicos adversos

El Gobierno estadounidense estaba ocultando información importante sobre los UAP

El proyecto de ley es claro en sus definiciones

Nacido en Brooklyn, y graduado por la Facultad de Derecho de Harvard, el senador demócrata Schumer ha declarado a The Hill que “la gran cantidad y variedad” de afirmaciones relacionadas con ovnis “llevó a algunos en el Congreso a creer que el [gobierno de los EE. UU.] estaba ocultando información importante sobre UAP durante amplios períodos de tiempo”. Y denunció que no han sido desclasificadas ni las pruebas ni los testimonios creíbles que indican la existencia de los UAP, tal como exige la ley en vigor.

El acrónimo UAP, según reza en la Ley de divulgación, “incluye lo que anteriormente se describía como platillos volantes; fenómenos aéreos no identificados; objetos voladores no identificados y objetos submarinos no identificados”.

Y, continúa: “El Presidente, por y con el asesoramiento y consentimiento del Senado, nombrará, sin tener en cuenta la afiliación política, a ocho ciudadanos de los Estados Unidos para que actúen como miembros de la Junta de Revisión para garantizar y facilitar la revisión, la transmisión al archivero y la divulgación pública de los registros gubernamentales relacionados con fenómenos anómalos no identificados”.

La enmienda eliminaría los fondos para cualquier programa secreto de recuperación de ovnis y de ingeniería inversa

Bajo las versiones actuales del Senado de la Ley de Autorización de Inteligencia y la NDAA, cualquier organización que posea materiales relacionados con UAP tendría un período de amnistía de 60 días una vez que se apruebe la ley para divulgar dichos materiales, lo que significa que Lockheed Martin o cualquier otra compañía aeroespacial que pudiera estar en posesión estaría obligada a entregarlos al Gobierno. Al conocerse este punto apareció en Twitter una presunta fotografía de la casa de un empleado de la Lockheed Martin en la que se puede ver un platillo volante, junto a proyectos aeronáuticos de vanguardia.

La enmienda eliminaría los fondos para cualquier programa secreto de recuperación de ovnis y de ingeniería inversa, la propuesta bipartidista tiene una disposición que declara que “cualquiera y todos los [ovnis] recuperados y las pruebas biológicas de inteligencia no humana que puedan ser controladas por personas o entidades privadas” se transferirán al gobierno de los EE. UU. “en interés del bien público”.

Además, para garantizar la eventual publicación de todos los documentos e información sobre ovnis del gobierno, la nueva legislación requiere un “Plan de Campaña de Divulgación Controlada”. En resumen, si la junta de revisión propuesta de nueve miembros considera que los documentos UAP son demasiado sensibles para publicarlos de inmediato, dichos registros estarían sujetos a un “plan basado en puntos de referencia” con recomendaciones para el “momento exacto” en que “pueden ser revelados apropiadamente a el público.”

La enmienda de la NDAA cuenta con el apoyo de los senadores republicanos Marco Rubio, de Florida, Mike Rounds, de Dakota del Sur, y Todd Young, del estado de Indiana. Del lado demócrata están los senadores Kirsten Gillibrand, de Nueva York, y Martin Heinrich, de Nuevo México.

Una cosa queda clara en esta enmienda: el Pentágono y la AARO, no se perciben como suficientes para brindar transparencia al pueblo estadounidense.

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