Un terraplanista se lanzará al espacio en un cohete casero para probar su teoría
August 12, 2019 El Mundo , NoticiasApodado como «Mad» Mike Hughes, su intención es alcanzar los 1.500 metros de altura con el vehículo propulsado a vapor de agua.
El programa «Homemade Astronauts» (algo así como «astronautas caseros») del canal Science Channel -que se estrenará en 2020- tiene como objetivo grabar los esfuerzos de civiles aficionados fascinados por el espacio. En esta línea, el próximo domingo inmortalizará el intento de «Mad» Mike Hughes, un conductor de limusinas, «temerario» y constructor de cohetes aficionado para alcanzar los 1.500 metros de altura. El artefacto, impulsado por vapor, ha sido probado anteriormente en otro lanzamiento en el que Hughes consiguió llegar hasta los 572 metros. La «misión» fue un éxito, si bien el «temerario» astronauta -como él mismo se define- de 62 años acabó con magulladuras y una vértebra comprimida.
Según se explica en su propio documental (llamado «Rocketman The Documentary»), la motivación de Hughes es llegar a una altura tal que sea posible fotografiar lo que él cree que es la Tierra: un disco plano en vez de una esfera. De hecho, la comunidad terraplanista es una de sus mayores sustentadoras, habiendo recaudado hasta la fecha casi 10.000 dólares para su propósito.
Sin embargo, en una de las últimas entrevistas que ha concedido afirma que aunque sigue teniendo claro que la Tierra es plana, estas creencias no están ligadas a su intento por llegar al espacio de forma «casera». «Creo que la Tierra es plana (…) Pero esto no tiene nada que ver con los lanzamientos de cohetes de vapor. Nunca lo hizo y nunca lo hará. ¡Soy un temerario!», explica a Space.com.
El cohete a vapor
En marzo de 2018, después de algunos intentos fallidos, Hughes, a bordo del cohete, se lanzó con éxito hasta más de medio kilómetro de altura. En ese momento, se desplegó el paracaídas y el cohete cayó en picado al suelo. Sin embargo, sobrevivió, aunque fue sacado de la nave visiblemente afectado. Se supone que el nuevo prototipo -que cuenta con una aplicación de citas online como principal patrocinador– estará mejor preparado para la nueva y más peligrosa misión.
Se trata de un nuevo paso para conseguir llegar hasta la línea Karman, el límite que significa el comienzo del espacio -y que está a 100.000 metros-. De hecho, para conseguirlo, él y su compañero Waldo Stakes están desarrollando un «rock-oon», que es parte cohete y parte globo. Esencialmente, el globo se uniría al cohete y llevaría a Hughes a una parte del camino, para luego disparar el cohete impulsado por peróxido de hidrógeno y recorrer el resto de la distancia. Ambos esperan tener listo este artefacto dentro de unos dos años, si bien antes necesitan recaudar 2,8 millones de dólares.