Se trata de “una fuente de radio variable altamente polarizada ubicada cerca del centro galáctico y sin una contraparte clara de múltiples longitudes de onda”, explica Ziteng Wang, el líder del equipo de los astrónomos de la Universidad de Sídney (Australia), responsables del descubrimiento.
De momento, el objeto ha sido bautizado ASKAP J173608.2-321635 y los detalles acerca de su hallazgo y características se publicarán en breve en una investigación en la revista The Astrophysical Journal
“El ASKAP J173608.2-321635 puede representar parte de una nueva clase de objetos que se están descubriendo a través de los estudios de imágenes de radio”, afirma Wang, citado por Science Alert.
El objeto misterioso se detectó con la ayuda del ASKAP, en Australia. Este es uno de los radiotelescopios más sensibles jamás construido en el mundo, el cual fue diseñado especialmente para permitir a los científicos echar una mirada más profunda al universo de las señales de radio. Con el dispositivo ya se han encontrado cosas que nunca antes se habían visto, como círculos de radio extraños, galaxias desconocidas y misteriosas ráfagas rápidas de radio.
Los científicos no descartan que el ASKAP J173608.2-32163 sea un tipo ya conocido de objeto cósmico. Sin embargo, de ser este el caso, ciertamente ampliaría la definición de tal objeto, teniendo en cuenta las características que los científicos ya han podido identificar.
El ASKAP J173608.2-32163 es muy variable, es decir, emite ondas de radio durante semanas seguidas y luego desaparece. La señal también está muy polarizada, lo que significa que la orientación de la oscilación de la onda electromagnética está torcida, tanto lineal como circularmente, explica Science Alert.
El objeto también es bastante difícil de detectar. Antes de abril de 2019 nunca había sido detectado por el ASKAP. A partir de este período hasta agosto de 2020, la señal apareció 13 veces en los datos recolectados. Sin embargo, observaciones de seguimiento en abril y julio de 2020 llevadas a cabo con un radiotelescopio diferente no detectaron su presencia.
La existencia del objeto se confirmó con observaciones de los radiotelescopios MeerKAT (Sudáfrica) en febrero de 2021 y del ATCA (Australia) en abril del mismo año. Sin embargo, el ASKAP J173608.2-32163 jamás había sido detectado por estos aparatos anteriormente.
La fuente de las señales de radio tampoco apareció en observaciones de rayos X e infrarrojo cercano, ni en archivos de datos de radio recopilados por múltiples instrumentos analizados por los investigadores. Algunos tipos de estrellas varían en longitudes de onda de radio, como el misterioso objeto. Sin embargo, la no detección en longitudes de onda de rayos X e infrarrojo cercano hace que sea poco probable que se trate de este tipo de objeto.
Tampoco es probable que se trate de un púlsar, ya que estas estrellas de neutrones tienen una periodicidad regular, en una escala de tiempo de horas, lo que no coincide con el comportamiento de ASKAP J173608.2-32163. Además, los astrónomos han observado un lapso de tres meses sin detecciones del objeto, lo que también es inconsistente con los púlsares. Los científicos también descartaron la posibilidad de que se traten de binarias de rayos X, brotes de rayos gamma ni supernovas.
Sin embargo, el objeto comparte algunas propiedades con un tipo de señal misteriosa detectada cerca del centro galáctico. Se tratan de los transitorios de radio del centro galáctico —GCRT, por sus siglas en inglés—, tres de los cuales fueron identificados en las últimas dos décadas. Estas fuentes aún no se han explicado, pero tienen varias características en común con ASKAP J173608.2-32163. Si el objeto misterioso es un GCRT, su detección podría ayudar a los científicos a encontrar más fuentes de este tipo y descubrir exactamente qué son.