Nanumea, la isla más septentrional y la segunda más grande de Tuvalu, en el metaverso. / / Generador de Imágenes de la IA De Bing para T21 / Prensa Ibérica, Desarrollada con tecnología de DALL·E.
Tuvalu será el primer país del mundo que llega al metaverso
Antes de quedar sumergido por la elevación del nivel del mar, asegura su futuro biodigital en un espacio virtual.
Recreación artística de Teafualiku, la isla más pequeña de Tuvalu, en el metaverso. Se puede apreciar el contraste entre el azul del océano y el verde de la vegetación. La isla tiene una forma alargada y está rodeada de un arrecife de coral. En el centro de la isla hay una laguna de agua dulce. / Generador de Imágenes de la IA De Bing para T21 / Prensa Ibérica, Desarrollada con tecnología de DALL·E.
Antes de desaparecer sumergido por la subida del nivel del mar, Tuvalu, una pequeña nación insular del Pacífico, recreará en el metaverso su geografía y cultura para perdurar en el tiempo gestionado por una plataforma de ciudadanía digital. Un ejemplo de resiliencia, creatividad y visión de futuro para nuestro cambiante mundo.
Tuvalu es una pequeña nación insular del Pacífico que se enfrenta a la amenaza de desaparecer por el aumento del nivel del mar causado por el cambio climático. El país está formado por tres islas de coral y seis atolones que tienen una superficie total de menos de 26 km².
Según algunas estimaciones, la mitad del área de la capital, Funafuti, quedará inundada por las aguas de la marea en tres décadas. Para el año 2100, el 95% de la tierra quedará inundada por las mareas periódicas, lo que la hará esencialmente inhabitable.
Refugio virtual
Ante esta realidad, Tuvalu ha decidido tomar una medida radical y pionera: convertirse en la primera nación totalmente digitalizada que existe en el metaverso. El metaverso es un espacio virtual compartido donde las personas pueden interactuar entre sí y con objetos digitales mediante avatares.
Tuvalu planea crear una versión digital de sí mismo, replicando sus islas y lugares emblemáticos y guardando sus documentos históricos, registros de prácticas culturales, álbumes familiares y canciones tradicionales. El objetivo es capturar tanto de la vida isleña de Tuvalu como sea posible y crear una “gemela” para sobrevivir en el futuro.
El proyecto se anunció por primera vez en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (COP27) en noviembre de 2022 por el ministro de Justicia, Comunicación y Asuntos Exteriores de Tuvalu, Simon Kofe, quien dijo que era la única forma de preservar su país “pieza por pieza” para que puedan recordar a sus “hijos y nietos lo que fue su hogar”.
“Nuestra tierra, nuestro océano, nuestra cultura son los bienes más preciados de nuestro pueblo y para mantenerlos a salvo del daño, pase lo que pase en el mundo físico, los trasladaremos a la nube”, añadió Kofe.
Además, expresó la esperanza de que el Estado actual siga funcionando y sea reconocido internacionalmente aún en el espacio virtual, algo que todavía no está regulado por el derecho internacional. Kofe pronunció su discurso desde el metaverso, mostrando una réplica digital de uno de los islotes de Tuvalu, Teafualiku.
Proyecto en marcha
Desde entonces, Tuvalu ha seguido avanzando en su ambicioso plan de convertirse en la primera nación digital del mundo. Ha contratado a una agencia creativa y a un estudio de producción para desarrollar su presencia en el metaverso, empezando por su isla más pequeña, Teafualiku.
También ha colaborado con otras organizaciones e instituciones para obtener apoyo técnico y financiero para el proyecto. Según su sitio web oficial, Tuvalu espera completar la digitalización de Teafualiku a finales de 2023 y continuar con las otras ocho islas en los próximos años.
Teafualiku es un islote deshabitado que tiene una superficie de solo 0.12 km² y una altura máxima de 5 metros sobre el nivel del mar. Es considerado un lugar sagrado por los tuvaluanos, ya que se cree que es el lugar donde se originó la vida en Tuvalu.
Con todo detalle
En el metaverso, Teafualiku se ha recreado con gran detalle, incluyendo sus características geográficas, su flora y su fauna. Los visitantes pueden explorar la isla digital y aprender sobre su historia y su importancia cultural a través de narraciones interactivas y experiencias inmersivas.
El próximo paso del proyecto digital de Tuvalu es digitalizar las otras ocho islas que conforman el país, empezando por Nanumea, la más septentrional y la segunda más grande.
Nanumea tiene una población de unos 600 habitantes y una superficie de 3.87 km². Es conocida por su belleza natural, su rica biodiversidad y su patrimonio histórico, ya que fue escenario de una batalla naval entre Estados Unidos y Japón durante la Segunda Guerra Mundial.
El proceso de digitalización de Nanumea se espera que dure unos seis meses y que involucre a los habitantes locales en la recopilación y el registro de datos sobre su isla.
También la cultura
Además de digitalizar sus islas, Tuvalu también está trabajando para digitalizar otros aspectos de su identidad nacional, como su lengua, su cultura, su música, su gastronomía, su deporte y su gobierno.
Por ejemplo, Tuvalu ha creado un diccionario digital de tuvaluano, el idioma oficial del país, que contiene más de 10,000 palabras y frases con sus traducciones al inglés y al francés. También ha creado una biblioteca digital que alberga más de 1,000 documentos históricos, legales y culturales relacionados con Tuvalu. Asimismo, ha creado una galería digital que exhibe más de 500 obras de arte y artesanía tradicionales de Tuvalu.
Ciudadanía digital
Otro aspecto importante del proyecto digital de Tuvalu es la creación de una plataforma de ciudadanía digital que permita a los tuvaluanos acceder a servicios públicos y privados en línea, como la educación, la salud, la banca, el comercio y el entretenimiento.
Esta plataforma también permitirá a los tuvaluanos participar en la gobernabilidad y la democracia digitales, mediante el voto electrónico, las consultas públicas y las iniciativas ciudadanas.
Además, esta plataforma facilitará la integración de Tuvalu en la economía global, permitiendo a los tuvaluanos crear y gestionar sus propios activos digitales, como las criptomonedas, los tokens no fungibles (NFT) y los dominios web.
Modelo de futuro
Tuvalu espera que su iniciativa inspire a otros países y comunidades vulnerables al cambio climático a explorar las posibilidades del metaverso como una forma de preservar su identidad y patrimonio. También espera que sirva para concienciar al mundo sobre la urgencia de actuar contra el calentamiento global y sus devastadores efectos.
Tuvalu es un país que no se rinde ante el desafío del cambio climático y que busca innovar y adaptarse a las nuevas tecnologías. Su proyecto de convertirse en una nación digital es un ejemplo de resiliencia, creatividad y visión de futuro. Tuvalu nos invita a visitar su país en el metaverso y a conocer su cultura y su historia. ¿Te animas?
