The Black Alien: el hombre transespecie que está modificando su cuerpo para ser un alien
The Black Alien actualmente se encuentra en el 41% de su cambio físico que lo hace uno de los últimos ejemplos de personas transespecie.
Foto: Instagram
Su nombre de nacimiento es Anthony Loffredo. Pero este hombre de 33 años, nacido en Francia, es mejor conocido como The Black Alien. Su apariencia física no está para nada alejada de su apodo.
“Tengo treintena implantes de silicona que debo volver a ponerme en toda la cara y el cráneo, una pierna que tengo que quitar, la otra mano por hacer, llenar mis dos brazos de implantes, también mi torso, mi tibia derecha, mis dos hombros, mi dos costillas, y no seremos muy mal en la meta a lograr”, escribe en su perfil de Instagram.
Anthony (The Black Alien) está llevando un proceso total para modificar su cuerpo y convertirse en una especie de alienígena. En entrevista para El Periódico, de Barcelona, comentó que quiere amputarse una pierna para reemplazarla por una prótesis robótica.
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No estaba viviendo mi vida de la manera que quería
En una entrevista en 2017, Anthony Loffredo se definió como “un apasionado de las mutaciones”, y aseguró que “tuve un cambio cuando era guardia de seguridad. Me di cuenta de que no estaba viviendo mi vida de la manera que quería”.
“Dejé todo a los 24 años y me fui a Australia. Esto se ha convertido en algo normal para mí. Me encanta ponerme en los zapatos de un personaje que da miedo”, ha confesado.
The Black Alien no se anda con miramientos a la hora de querer asumir una personalidad distinta. Tal y como lo ha dicho en sus redes sociales, actualmente se encuentra en el 41 % de su evolución. Este proceso se llama The Black Alien Project.
Este cambio se refleja en las modificaciones corporales a las que se ha sometido con el paso de los años: lengua bífida y pintada de verde, implantes bajo la piel, tatuajes en más de la mitad de su cuerpo, el cual esculpe con base en el ejercicio.
Anthony Loffredo antes y después
Dentro de las modificaciones corporales más notables que se ha hecho podemos observar sus dientes afilados, la mitad del labio superior extirpada y la esclerótica (la parte blanca alrededor del iris en el ojo) tatuada de verde.
Anthony también se ha cortado la nariz, las orejas, y los dedos meñique y el anular de su mano izquierda. La psicología tiene una definición para personas como The Black Alien: transespecie. Es decir, alguien que desea asumir una apariencia ajena a su condición humana.
The Black Alien. Twitter.
Qué es una persona transespecie
Las personas transespecie se asumen distintos al género humano y se identifican más con una identidad animal, en la mayoría de los casos. A partir de ello, la mayoría de los transespecie comienzan un proceso de modificación corporal (a través de tatuajes o implantes) que los va alejando cada vez más de su apariencia humana.
“De todas las posibilidades del ser que la vida contemporánea nos proporciona, la de identificarse como un humano transespecie es de las menos estudiadas por la psicología, la sociología y la filosofía. No es raro encontrar definiciones como la de Robertson: un fenómeno de la espiritualidad posmoderna influido por la cultura, o explicaciones que tienen que ver con la sugestión, el delirio o la emergencia de un nuevo género humano”.
El fragmento anterior es autoría de Florencia Molfino en un texto titulado “El nacimiento de los hombres no humanos”, publicado en el sitio web de la Revista de la Universidad de México.
En búsqueda de una nueva piel
Foto: Instagram
Alrededor del mundo hay más personas como The Black Alien, que están en un proceso de cambio, evolución o transformación física. Muchas de ellas mantienen contacto a través de foros digitales en internet en los cuales comparten sus experiencias. Conforman una especie de subcultura que comparte códigos, pero sobre todo su misión de asumir una personalidad ajena a lo humano.
Un caso que se puede emparentar al de The Black Alien es el del artista español Manel de Aguas, quien se considera un ejemplo del hombre transespecie. En 2020, Aguas se implantó dos aletas de pez que él mismo diseñó y contó su experiencia a la revista Semana:
“Al final, ser alguien transespecie, ser alguien cyborg, es una idea que tenemos que bajar un poco a la tierra porque es algo que creó la ciencia ficción y todos los referentes que tenemos aún lo contemplan como una idea muy abstracta, como de alguien que no es normal y al final yo tengo una vida muy normal, yo quedo con mis amigos, yo salgo por ahí. Lo único diferente es que tengo un órgano cibernético más que el resto de mis amigos”.
