Sorpresa en la cueva sumergida más profunda del mundo
September 4, 2020 El Mundo , NoticiasNuevas mediciones del abismo de Hranice, en la República checa, descubren que la trinchera llega a un kilómetro de profundidad.
«No sé si se trata de cinco metros o cien, pero va a cambiar la profundidad». Cuando hace cuatro años Miroslav Lukas y su equipo de espeleólogos descubrieron en la Repúblia checa el pozo sumergido del abismo de Hranice sabían que estaban delante de una de esas curiosidades geológicas de récord. Entonces estimaron que tenía 473 metros de profundidad, lo que lo convertía en el más profundo de agua dulce del mundo. Los investigadores sospechaban que podía serlo aún más, pero sus mejores predicciones se quedaron cortas. Una expedición científica ha revelado que el abismo desciende hasta un kilómetro, más del doble de lo que se creía hasta ahora.
En 2016, los científicos utilizaron un vehículo operado a distancia para averiguar la profundidad del abismo de Hranice, pero el cable de comunicación de fibra óptica del vehículo impidió llegar aún más lejos, por lo que, en realidad, la verdadera extensión del sistema de cuevas seguía siendo un misterio.
Ahora, según explica «Science», el equipo ha utilizado un serie de técnicas geofísicas para conocer hasta dónde pueden llegar las cuevas. «Recopilaron datos de una serie de electrodos sobre el suelo que midieron la facilidad con la que la piedra caliza conducía la electricidad, lo que puede indicar regiones de rocas o huecos. Luego, utilizaron sensores para buscar pequeñas variaciones en el tirón de la gravedad, que pueden revelar cavernas. Finalmente, registraron los reflejos de las ondas sísmicas producidas por la activación de pequeñas cargas explosivas, una forma de producir un mapa subterráneo aproximado», explica en la web de la revista científica.
La imagen resultante reveló un sistema de cavernas profundas en forma de trinchera, algunas llenas de sedimentos, talladas en la piedra caliza, dice a «Science» el geofísico Radek Klanica de la Academia Checa de Ciencias, quien dirigió el estudio. Y lo más sorprendente es que estas cuevas llegan hasta un kilómetro por debajo de la superficie, mucho más profundas que las estimaciones anteriores.
Agua filtrada
El equipo explica en el «Journal of Geophysical Research» que el abismo se creo de arriba a abajo, al filtrarse en la roca caliza el agua de la lluvia y la nieve. Los investigadores creen que también es posible que se haya producido una afluencia adicional de agua desde abajo, lo que explica la presencia de isótopos de carbono y helio.
El abismo de Hranice es la cueva sumergida de agua dulce más profunda del mundo, pero no la más profunda en general. Esa es la cueva Veryovkina de Georgia, que baja 2,2 kilómetros bajo la superficie y se formó cuando el nivel del mar en el vecino Mar Negro descendió drásticamente hace millones de años.