Qué efectos ha tenido la eyección solar que golpeó la Tierra el 21 de julio

La llegada de la eyección solar a nuestro planeta no ha causado grandes alteraciones en las telecomunicaciones, aunque sus efectos se han dejado notar en forma de auroras en varias regiones del mundo. ¿Es posible que próximas tormentas solares afecten a la tecnología que usamos en el día a día?

Una aurora polar causada por la tormenta electromagnética que provocó una eyección solar en 2012 iluminó la noche de Finlandia.

Gracias a la ciencia podemos saber con precisión cuándo una fulguración solar llegará a la Tierra. Sin embargo, calcular los efectos de dicho fenómeno solar es mucho más complicado e impredecible. En este caso, la eyección de masa coronaria que salió del Sol camino a la Tierra el pasado 15 de julio se dejó notar el 21 de julio en diferentes localizaciones del planeta. Aunque hasta el momento no se han registrado incidencias en los sistemas de telecomunicaciones a gran escala, su impacto se ha notado en forma de auroras polares en localizaciones como Nueva Zelanda y Estados Unidos.

La doctora Tamitha Skov, conocida como la “mujer del tiempo espacial” en Estados Unidos, fue una de las primeras en avisar a través de sus redes sociales de este fenómeno y de sus posibles consecuencias en nuestro planeta. Allí compartió numerosas imágenes de las auroras que la tormenta electromagnética causada por el impacto de la eyección solar con la magnetosfera terrestre en diferentes localizaciones de la costa pacífica y el centro de Estados Unidos.

Hasta el momento no se han registrado incidencias en los sistemas de telecomunicaciones a gran escala y su impacto se ha notado en forma de auroras polares

Eyecciones solares futuras: ¿qué consecuencias tendrán?

Los indicios registrados sobre este tipo de fenómenos apuntan a que su naturaleza es principalmente magnética y que suceden cuando el Sol entra en su periodo de mayor actividad magnética. En estos ciclos solares, que se dan en un intervalo temporal que comprende los 11 años, los máximos solares hacen que este tipo de eventos sean especialmente frecuentes.

En el momento actual, el astro rey se está encaminando a su periodo de máxima actividad, que se estima que llegará en torno al año 2024.

Un filamento de masa coronaria se separa del Sol en una eyección de masa coronaria del astro en el año 2015. / NASA/Solar Dynamics Observatory

Aunque estas eyecciones, que son corrientes durante los periodos de mayor actividad magnética del Sol, pueden llegar hasta la Tierra y causar alteraciones en la magnetosfera, causando auroras como las vistas y fallos en los sistemas de telecomunicaciones en las redes eléctricas y los satélites, conviene recordar que eso no significa que todas las eyecciones de masa coronaria del Sol se dirijan directamente a la Tierra.

Así afectan las tormentas electromagnéticas al GPS

Sin embargo, las eyecciones que llegan a la Tierra y crean una tormenta electromagnética en la atmósfera, como en este caso, pueden tener consecuencias inesperadas para un mundo cada vez más dependiente de las tecnologías. El primer afectado es el GPS: sus señales se transmiten desde los satélites hasta los dispositivos en tierra firme, atravesando la ionosfera terrestre.

En condiciones normales, estos sistemas pueden proveer la ubicación con un error estimado de un metro o incluso menos. Pero cuando una tormenta espacial se aproxima a la Tierra, sus impactos se dejan notar con fuerza.

Una tormenta electromagnética de clase G-1 provocó el surgimiento de una aurora polar en Canadá tras el impacto de una eyección solar en la Tierra en 2011. / NASA/Zoltan Kenwell

Cuando se dan episodios como los sucedidos estos días los sistemas GPS pueden errar en hasta decenas de metros. Según el NOAA (el Centro para la Predicción del Tiempo Espacial), si la ionosfera se viera altamente afectada, los sistemas GPS no podrían bloquear la señal del satélite y su posición se volvería imprecisa en las latitudes más altas, como el norte de Europa, América y Asia.

NG