¿Los libros electrónicos desbancan a los impresos?
La Feria de Fráncfort, el mayor evento editorial del mundo, auguró hace más de 10 años que los ebook se impondrían a los libros en papel. Contra todo pronóstico, las previsiones no se han cumplido y no parece que vayan a hacerlo pronto.
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Es una pregunta que se hace el sector editorial desde hace muchos años. ¿Los libros electrónicos desbancan a los impresos?
Una estimación compartida por numerosos expertos
Más de mil profesionales calcularon que en 2018, el soporte digital superaría al impreso. En aquella edición, hace más de una década, los libros clásicos representaban solo el 42% del volumen total. Sus parientes digitales, los DVD, los audiolibros y los nuevos reproductores, el resto.
El tiempo y las ventas han actualizado esta cuestión. Ya no son soportes enemigos, enfrentados, sino aliados. Muestra de ello, por ejemplo, es el espacio creado en la Feria de Fráncfort para albergar las versiones digitales de los libros. El tono se ha rebajado, aunque los ebook continúan siendo una parte importante para las editoriales. Que no hayan alcanzado los vaticinios mencionados, en mente de muchos, no significa que no tengan un gran potencial. Se calcula que en 2020 esta industria va a generar 20.000 millones de dólares.
Unas ventas que crecen despacio
En lo que no termina de haber un dato claro es en la cantidad de ventas. Sin duda, representan sumas de dinero enormes, pero ¿están aumentando o en retroceso?
Según el país, la situación es una u otra. En Estados Unidos las ventas han caído un 10% en cinco años. El aumento del precio y, sobre todo, de la piratería explican esta reducción. Según Miguel Barrero, presidente de la Federación de Gremios de Editores de España (FGEE), en nuestro país solo el 4% de los libros que se leen son comprados, apróximadamente, frente al resto, que son descargados de manera ilegal.
En España, experimentan un crecimiento leve. Cada año se venden más libros electrónicos, pero éstos representan solo un escaso 5% del total de libros vendidos. Aunque también hay expertos que apuntan que en estos cálculos no se incluyen las ventas que no son de grandes editoriales.
En el resto de Europa, el porcentaje es similar, por lo que aún estamos lejos de que los ebook desbanquen a los impresos.
