Los cinco grandes fracasos tecnológicos de 2018

La edición genética de dos embriones con la herramienta CRISPR, los cigarrillos electrónicos que han aumentado la adicción a la nicotina entre los jóvenes o el buscador que obedece a la censura china. Estos son algunos de los proyectos tecnológicos que desearíamos que no se hubieran desarrollado el pasado año.

John Ueland

2018 fue el año en el que las tecnologías (y las personas que las crearon) aparentemente no pudieron hacer nada bien e hicieron muchas cosas que estaban mal. Como una de mis fuentes escribió en un tuit reaccionando a una hazaña tecnológica tonta, “2018 no puede terminar lo suficientemente pronto”.

Durante los últimos años, MIT Technology Review en Español ha publicado una lista de los que consideramos los usos más inútiles o destructivos de las tecnologías (aquí están los de 2017, 2016 , 2015 y 2014). Sin embargo, en 2018 los malos fueron más malos y los errores parecieron aún más graves: la tecnología ha sido usada para propagar el odio y la adicción, para justificar el suicidio y para experimentar con niños recién nacidos. Aquí está nuestra lista de los mayores fracasos tecnológicos del año que acabamos de despedir:

1. Los bebés chinos editados con CRISPR

Todos sabíamos que algún día nacerían los humanos editados genéticamente, pero nadie quería que ocurriera tan pronto, ni tampoco de la manera en la que ocurrió. En noviembre, MIT Technology Review informó que el científico de la Universidad de Ciencia y Tecnología del Sur en Shenzhen (China), He Jiankui, había iniciado en secreto el primer intento de crear niños con genes editados: modificó embriones humanos utilizando la herramienta molecular CRISPR para eliminar un solo gen. Afirmó que habían nacido dos niñas gemelas, llamadas Lulu y Nana, y que ambas serían inmunes al VIH debido a que él había alterado sus genomas.

Sin embargo, la modificación no fue particularmente bien y ni siquiera era necesaria, ya que existen formas más baratas y más fáciles de prevenir la infección por VIH. Ahora parece como si las gemelas hubieran sido el resultado sin su consentimiento del afán irresponsable de un científico para convertirse en el número uno. Sin embargo, He, que esperaba obtener el Premio Nobel, está siendo investigado en China.

Leer más en: Todo lo que se sabe sobre los bebés chinos editados con CRISPR(MIT Technology Review en Español), El escándalo de los bebés CRISPRempeora cada día (en inglés) (The Atlantic), ¿Por qué los científicos están tan molestos por los primeros bebés CRISPR? (The New York Times en Español),¿Editar bebés? Primero debemos aprender mucho más (en inglés) (The New York Times).

He Jiunkai. / Flickr

2. La epidemia de nicotina por los cigarrillos electrónicos Juul

Juul

Reconozcamos lo que es debido: dos diseñadores de producto que estudiaron en Stanford, James Monsees y Adam Bowen, son los responsables de una epidemia de adicción a la nicotina entre los jóvenes.

El dúo fundó Juul Labs y creó un dispositivo electrónico para vaporear de aspecto sofisticado y diseñado para dispensar la sustancia adictiva. Por supuesto, algunos fumadores con los dedos amarillos acostumbrados a inhalar papeles quemados podrían beneficiarse de un cambio a la inhalación de un líquido cargado de nicotina en cápsulas. El problema es que Juul ofreció el “iPod de los cigarrillos electrónicos” en sabores frutales como crema y mango y lo lanzó a los jóvenes en Instagram.

Ahora, la Administración de Medicamentos y Alimentos de EE. UU. (FDA por sus siglas en inglés) afirma que existe una “epidemia de nicotina entre los jóvenes”. El número de adolescentes que usan vapeadores se duplicó en el último año en Estados Unidos y los trabajadores del sector sanitario afirman que es la adicción a sustancias con el desarrollo más rápido que jamás han visto. Juul, con cerca del 75 % del mercado, es la empresa que más se beneficia de este problema.

En noviembre, Juul dijo que cerraría sus cuentas de redes sociales y restringiría las ventas de algunos sabores.

Leer más en: El precio de ser cool: un adolescente, un Juuul y una adicción a la nicotina (The New York Times), Vapear se ha vuelto viral: el asombroso aumento del uso de cigarrillos electrónicos en los adolescentes, Plan de Acción de JUUL Labs (Juul Labs).

3. Un motor de búsqueda que acata la censura china

Cuando Google salió de China en 2010 y cerró Google.cn, el gigantesco buscador dijo que ya no podía atenerse al empeño de China de ocultar los resultados políticamente delicados. En una publicación en su blog, el principal responsable de asuntos jurídicos de Google hizo una “promesa de dejar de censurar las búsquedas”.

Hasta ahí llegaron las promesas. Un equipo de hasta 100 empleados de Google ha estado trabajando en el Proyecto Dragonfly, un trabajo por construir un nuevo motor de búsqueda para China. Se trata una aplicación de Android diseñada para cumplir con el régimen de censura de China y bloquear las páginas web como Wikipedia y la BBC.

Desde agosto, los propios empleados de Google han intentado acabar con Dragonfly. Algunos llevaban pancartas con el mensaje “No seas un ladrillo en el firewall chino” y firmaron una carta diciendo que esa aplicación “haría a Google cómplice de la opresión”.

El CEO de Google, Sundar Pichai, está contestando con evasivas. Afirmó al Congreso de EE.UU. en diciembre que el proyecto era meramente exploratorio y que “no había planes para lanzar un producto de búsqueda en China”. Pero Pichai no renovó la promesa de Google contra la censura. En cambio, señaló que Google se siente todavía obligado a proporcionar búsquedas a todas las personas de todo el mundo. Y es así porque el “acceso a la información es un importante derecho humano”.

¿Lo es? Si usted buscó información sobre los derechos humanos dentro de China, es posible que nunca lo sepa.

Leer más en: Documentos filtrados revelan que Google planea lanzar un motor de búsqueda con censura en China (en inglés) (The Intercept), El esfuerzo interno de Google para desarrollar un motor de búsqueda con censura en China (The Intercept), el Testimonio de Sundar Pichai ante el Comité Judicial de la Cámara de Representantes.

AP Photo | Ng Han Guan

4. La limpieza étnica impulsada en Facebook

La inteligencia rusa, los políticos mentirosos, los neonazis… Parece que todos los que querían vender algún odio descubrieron que Facebook, la red social más grande del mundo, era una plataforma bastante amigable para lograr sus objetivos.

Sin duda ese fue el caso de un gran equipo de oficiales militares de Birmania (Myanmar) que en 2016 usaron Facebook sistemáticamente para preparar el escenario de limpieza étnica contra la minoría rohinyá de ese país, mayoritariamente musulmana. Emplearon la ya conocida combinación de noticias falsas y cuentas de troles para avivar el odio religioso y el miedo público antes de empezar a violar y matar a la población rohinyá y a quemar sus aldeas. Más de 700.000 rohinyás finalmente huyeron de su país en lo que The New York Times definió como “la mayor migración humana forzada en la historia reciente”. Facebook reconoció que su plataforma fue utilizada “para difundir la propaganda de forma encubierta” en Myanmar.

Esos acontecimientos ocurrieron hace dos años. Entonces, ¿por qué Facebook está en nuestra lista de 2018? Porque no ha podido evitar que su producto se use como una plataforma para los crímenes de odio organizados. De hecho, está lleno de noticias falsas y propaganda, y admitió que contrató a una empresa de relaciones públicas para atacar al multimillonario George Soros y a otros críticos de la red social. En diciembre, el Southern Poverty Law Center se unió a otros grupos para pedir un cambio en la cúpula. Hicieron un llamamiento para que el fundador Mark Zuckerberg dimitiera como presidente de la compañía (aunque siga siendo el CEO) para permitir una supervisión más independiente.

Leer más en: El genocidio incitado en Facebook, con publicaciones del Ejército de Myanmar (en inglés) (The New York Times), Carta a Zuckerberg(Muslim Advocates) El responsable de política de Facebook admite haber contratado a una empresa de relaciones públicas para atacar a George Soros (en inglés) (The Guardian).

El viernes 25 de enero de 2002, miembros de la minoría musulmana rohinga en Myanmar gobernada por militares están detrás de la cerca en el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados en Malasia en Kuala Lumpur. El grupo de personas de Myanmar, sujeto a persecución en su país de origen. Fueron obligados a ingresar a la oficina del ACNUR el viernes, en busca de asilo, dijeron testigos. / AP / Andy Wong

5. Suicidios asistidos para almacenar cerebros

Afortunadamente, una start-up llamada Nectome no llegó a conectar a una persona moribunda a una máquina de corazón y pulmón para inyectarle unos productos químicos embalsamadores. El problema es que lo quería hacer. Algunas personas ya le habían dado a la compañía depósitos de más de 20.000 euros para ponerse a la cola.

El objetivo final era el deseo transhumanista del “almacenamiento cerebral”. Preserve su cerebro perfectamente hoy, y tal vez algún día sus recuerdos y su personalidad podrán ser extraídos y cargados en un ordenador o en un robot. Su idea: para evitar los daños en el cerebro, el procedimiento de embalsamamiento debe comenzar antes de que usted realmente muera. En otras palabras, supone la eutanasia. Nectome cree que esto sería legal bajo las leyes de suicidio asistido por un médico, al menos en California (EE.UU.)

La compañía, que cuenta con el apoyo de Y Combinator, ha hecho en realidad un gran trabajo para preservar los cerebros de los animales, pero su interés en el método del suicidio por cerebro resultó demasiado controvertido para el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT, EE.UU.), que canceló la colaboración de investigación que tuvo con la start-up. Sin embargo, Nectome todavía sigue viva, afirma que continúa con la investigación y está buscando a nuevos empleados. Será mejor preguntar por su plan de jubilación.

Leer más en: Conserve su cerebro para siempre sometiéndose a un suicidio asistido (MIT Technology Review en Español), El MIT corta con la empresa que pide eutanasias para almacenar cerebros (MIT Technology Review en Español).