Llega el equinoccio, ¿qué significa eso?

Aunque el equinoccio no es el mejor momento para equilibrar un huevo, anuncia la llegada del otoño boreal, las temperaturas más frías y los días más cortos para el hemisferio norte, donde vive alrededor del 90% de la población mundial. Para el hemisferio sur significa lo contrario: clima más cálido y el inicio de la primavera.

ESA

Para ilustrar lo que pasa con el equinoccio, el doctor James O’Donoghue, un científico planetario de la Agencia de Exploración Aeroespacial de Japón, creó una animación que resume claramente cómo funcionan estos fenómenos, junto con su relación con los solsticios.

Los solsticios y equinoccios son productos de la inclinación axial de la Tierra: el grado en que el planeta está inclinado en relación con el Sol.

El eje alrededor del cual gira la Tierra está a unos 23,5 grados, por lo que las diferentes partes del planeta se exponen en mayor o menor grado a la luz solar a medida que el planeta gira alrededor de la estrella. Es por eso que tenemos temporadas y el hemisferio norte y sur experimentan estaciones en momentos opuestos: durante el invierno en el hemisferio norte, el hemisferio sur se inclina más hacia el Sol, y viceversa.

El efecto más dramático de la inclinación axial se produce durante los solsticios, ya que estos son dos días cuando un lado del planeta está inclinado más lejos del Sol y el otro, más cerca. El 21 de diciembre el hemisferio norte recibe menos de nueve horas de luz diurna, mientras que el hemisferio sur recibe más de 15.

Durante el solsticio de verano, “la luz del sol es más intensa ya que solo tiene que pasar a través de una corta columna de atmósfera”, explicó en Twitter O’Donoghue. Es por eso que hace calor durante el verano en general.

Las dos veces del año en que el eje de la Tierra no está inclinado hacia o lejos del Sol, lo que lleva a la luz solar a golpear los hemisferios norte y sur por igual, son los equinoccios. En estos días, ambos hemisferios del planeta experimentan 12 horas iguales de luz solar y oscuridad.

Entonces, si alguien se parara directamente en el ecuador a la 1:30 p. m. GMT del 22 de septiembre, su sombra estaría en su mínimo absoluto y el Sol también aparecería casi directamente por encima. Pero el momento sin sombra sería fugaz, ya que la Tierra se mueve alrededor del Sol a aproximadamente a 107.182 km/h.

Sputnik