Las “microfactorías vivientes” que algún día reemplazarán a muchas inyecciones

Los pacientes con diabetes generalmente dependen de continuas inyecciones de insulina para controlar su enfermedad. Pero la joven empresa Sigilon Therapeutics, impulsada por el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), en Cambridge, Estados Unidos, está desarrollando un dispositivo implantable para producción de insulina que podría algún día volver obsoletas las inyecciones.

Sigilon Therapeutics se ha asociado con Eli Lilly and Company para desarrollar sistemas implantables que produzcan insulina. / MIT

Sigilon se asoció recientemente con el gigante farmacéutico Eli Lilly and Company para desarrollar “factorías vivientes de fármacos”, hechas de células modificadas encapsuladas que pueden ser implantadas de forma segura en el cuerpo, y producir insulina a lo largo de meses o incluso años. Más adelante, las células podrían ser modificadas para segregar otras hormonas, proteínas y anticuerpos.

La tecnología de Sigilon, basada en la investigación llevada a cabo durante la última década en el MIT, ha llevado a la creación de un dispositivo que proporciona un revestimiento a las células y las protege del sistema inmunitario del paciente. Así puede protegerse debidamente a un conjunto de células modificadas que lleven a cabo alguna tarea vital que el cuerpo del paciente no puede realizar debidamente, como por ejemplo la producción de insulina. Los dispositivos son diminutas cuentas de hidrogel, de aproximadamente 1 milímetro de diámetro, que pueden ser implantadas en el paciente a través de procedimientos mínimamente invasivos. Su recubrimiento externo, hecho de un polímero especial, evita la formación indeseada de tejido cicatricial y otros problemas parecidos.

“Esto nos permite tener ‘fábricas vivientes de fármacos’ dentro de nuestros cuerpos, que pueden suministrar sustancias terapéuticas, en la cantidad apropiada, en el lugar adecuado y cuando se necesita”, explica el cofundador y coinventor Daniel G. Anderson, profesor del Departamento de Ingeniería Química del MIT.

En el futuro, el polímero de Sigilon podría ser también modificado a fin de servir como recubrimiento para implantes médicos, como por ejemplo stents (pequeños tubos implantables para reparación arterial). En muchos casos, objetos de este y otros tipos provocan problemas, incluyendo la formación indeseada de tejido cicatricial. Con una adecuada interconexión del objeto extraño con su entorno viviente, estos problemas se pueden evitar.

NCYT