La inteligencia de los orangutanes no deja de sorprendernos

Recientes estudios científicos nos muestran fascinantes habilidades de estos grandes simios con los que compartimos buena parte de nuestro material genético.

Los orangutanes pertenecen al grupo de los grandes simios, formado también por  gorilas, bonobos y chimpancés. Todos ellos despiertan mucho interés, ya que son nuestros parientes más cercanos en el reino animal y, cuanto más los conocemos, más nos damos cuenta de que presentan muchas características que tradicionalmente se han atribuido exclusivamente a la especie humana.

Los expertos estiman que compartimos un 97% de nuestros genes con los orangutanes, y diversos estudios etológicos muestran que la inteligencia de nuestros parientes no es nada desdeñable. Dos trabajos muy recientes, por ejemplo, nos muestran que tienen la capacidad de elaborar pensamientos complejos.

El primero fue realizado en condiciones de cautividad y se publicó en PLOS ONE en febrero de 2019. Sus resultados demostraron que estos animales son capaces de tomar decisiones flexibles y valorar el equilibrio entre esfuerzo y resultados a la hora de elegir cómo actuar o qué herramienta utilizar en un escenario con diversas opciones. Dicho escenario consistía en cajas transparentes que podían contener manzanas o plátanos y a las que podían acceder con distintas herramientas (un palo o una pelota). Los científicos observaron que los orangutanes eran capaces de tomar decisiones para obtener la fruta más apetecible previa valoración del esfuerzo que debían realizar con una u otra herramienta.

No solo viven el ‘aquí y ahora’

Por otro lado, un estudio publicado a finales de 2018 en la revista Science Advances revelaba que los orangutanes tienen un cierto sentido del pasado y del futuro y son capaces de comunicarse con sus crías para mostrarles estos conceptos. Para ello, los científicos sometieron a un grupo de hembras que vivían junto a su prole en una selva de Sumatra a una situación estresante (un científico disfrazado de tigre) tras la cual pudieron constatar que las madres se comunicaban con sus crías para explicar los hechos y extraer enseñanzas para el futuro.

Por desgracia, los orangutanes se encuentran en peligro de extinción y una de las grandes amenazas que sufren es la deforestación, ya que se trata de especies que pasan la mayor parte del tiempo en los árboles. Pero los bosques tropicales en los que habitan están siendo talados para el aprovechamiento de madera, la extracción de minerales o para el cultivo. De esta forma, los orangutanes se quedan sin su hábitat principal y sus poblaciones se encuentran cada vez más aisladas. La caza furtiva y el comercio ilegal de especies tampoco son buenos aliados del orangután, y aún es muy frecuente la captura de crías para su venta en el mercado negro.

Tal es el grado de amenaza de estos simios que la última especie que descrita por los científicos, el orangután de Tapanuli (Pongo tapanuliensis), ha sido descrita cuando apenas quedan unos 800 ejemplares. Hasta el momento del hallazgo, en el año 2017, se conocían tan solo dos especies de orangután: los orangutanes de Borneo (Pongo pygmaeus) y los de Sumatra (Pongo abelii).

Para llamar la atención sobre el delicado estado de estas especies, cada 19 de agosto se celebra el Día Internacional del Orangután. 

Muy Interesante