La eliminación de soportes y artefactos para transmitir datos parece estar cada vez más cerca de ser realidad. Ahora, especialistas de Purdue University han creado una nueva tecnología que permite transmitir información utilizando solamente el toque de un dedo. De acuerdo a un comunicado, el prototipo utiliza al cuerpo como un puente entre los dispositivos que envían y reciben la información.
¿No resulta atractivo pensar en la posibilidad de cancelar un pago usando únicamente nuestros dedos, sin tarjetas o teléfonos de por medio? Ingenieros estadounidenses han desarrollado una nueva tecnología que prescinde de dispositivos como teléfonos inteligentes para enviar datos. Se trata del primer enfoque tecnológico diseñado para enviar cualquier información con el toque directo de un dedo.
Por ejemplo, utiliza un accesorio colocado en un reloj inteligente para compartir la información alojada en ese dispositivo con un ordenador portátil. Para transmitir los datos, el usuario solamente debe tocar la superficie del ordenador. No se requiere de ningún proceso extra, como por ejemplo escanear un código. Los resultados de la investigación que ha permitido desarrollar este prototipo fueron publicados recientemente en la revista Transactions on Computer-Human Interaction.
Según Shreyas Sen, profesor asociado de ingeniería eléctrica e informática en Purdue University y uno de los responsables de la investigación, “estamos acostumbrados a desbloquear dispositivos con nuestras huellas digitales, pero esta tecnología no se basaría en la biometría. Emplea en su defecto señales digitales, haciendo posible por ejemplo iniciar sesión en una aplicación en el teléfono de otra persona con un simple gesto táctil”, indicó.
Seguridad informática y eficacia
¿Cómo funciona? La tecnología crea una especie de “Internet” en el interior del cuerpo del usuario, una conexión que los teléfonos, relojes y otros dispositivos portátiles pueden emplear para enviar datos. Difiere de la tecnología Bluetooth, que ya es utilizada para este tipo de transmisión de información, por ejemplo en el caso de los artefactos que se incorporan al cuerpo con fines médicos, como los marcapasos.
Mientras las señales de Bluetooth pueden ser detectadas por un pirata informático a una relativa distancia, poniendo en peligro la seguridad de los datos, esto no sucede con la nueva tecnología. Es que el nuevo desarrollo mantiene las señales en el interior del cuerpo, trabajando en un rango sustancialmente inferior dentro del espectro electromagnético en comparación con la comunicación Bluetooth. Esto permite la transferencia de información solamente tocando una superficie, además de incrementar la seguridad y eficacia del sistema.
Vale destacar que la transferencia de datos se concreta únicamente cuando existe un toque directo, no al acercar el dedo. De esta forma, resulta imposible que alguien pueda interceptar la transmisión y violar la información. Esta condición marca las características superadoras del nuevo enfoque tecnológico en cuanto a la seguridad informática.
Barreras tecnológicas
Otra aplicación para esta tecnología son los controles de acceso, en los cuales se requiere de un llavero o algún accesorio similar para abrir una puerta, habitualmente mediante tecnología Bluetooth. Con la nueva tecnología no sería necesario el uso de ningún accesorio físico: se podría abrir la puerta solamente tocándola.
Pero aunque los especialistas resaltan la “magia” de esta nueva tecnología, indicando que no será necesario manipular nuestros teléfonos inteligentes ni sacarlos de nuestros bolsillos para realizar muchas acciones, al mismo tiempo la realidad indica que existen barretas tecnológicas a superar.
Por ejemplo, los dispositivos que trabajen con esta tecnología tendrán que disponer de alguna forma de “apagado” para evitar que la misma se accione con cualquier superficie cercana y habilitada. En tanto, el uso de este enfoque requiere de un hardware específico, que deberá ser compartido por todos los artefactos que lo adopten, un cambio que seguramente llevará un considerable tiempo de adaptación.