La humanidad comparte un código moral común
March 8, 2019 El Mundo , NoticiasLa ética evolucionó en nuestra especie para promover la cooperación.
La humanidad comparte un código ético común basado en siete reglas que se siguen en todas las culturas: nos llevan a abordar de forma parecida los problemas sociales y a usar un conjunto similar de reglas morales para resolverlos.
Mediante una encuesta realizada a 60 culturas diferentes, han podido establecer que siete normas éticas son comunes a la humanidad: ayudar a la familia, a la comunidad a la que se pertenece, devolver favores, ser valientes, respetar a los mayores, distribuir de manera justa los recursos y respetar las propiedades de los demás.
Si buscábamos un marco ético común desarrollado a lo largo de la evolución humana, este es el perfil culturalmente aceptado por nuestra especie. Es la primera vez que se profundiza tanto en el ética humana, ya que anteriores estudios habían obtenido resultados parciales de los valores compartidos en diferentes culturas.
El nuevo trabajo, dirigido por Oliver Scott Curry, Daniel Austin Mullins y Harvey Whitehouse, es el estudio intercultural más grande y completo jamás realizado sobre el tema de la moralidad.
Código universal
“Personas de todo el mundo enfrentan un conjunto de problemas sociales de forma parecida y usan un conjunto similar de reglas morales para resolverlos. Como se esperaba, estas siete reglas morales parecen ser universales en todas las culturas. Todos compartimos un código moral común. Todos están de acuerdo en que cooperar y promover el bien común es lo correcto”, explica Oliver Scott Curry, investigador principal, en un comunicado.
El estudio probó la teoría de que la moralidad evolucionó para promover la cooperación, y que, debido a que existen muchos tipos de cooperación, existen también muchos tipos de moralidad.
De acuerdo con esta teoría de la moralidad como cooperación, la selección de parientes explica por qué sentimos un deber especial de cuidar a nuestras familias y por qué aborrecemos el incesto.
El mutualismo explica por qué formamos grupos y coaliciones (hay fuerza y seguridad en los números) y, por lo tanto, por qué valoramos la unidad, la solidaridad y la lealtad.
El intercambio social explica por qué confiamos en los demás, correspondemos favores, sentimos culpa y gratitud, reparamos y perdonamos. Y la resolución de conflictos explica por qué nos involucramos en demostraciones costosas de destreza como la valentía y la generosidad, por qué respetamos a nuestros mayores, por qué dividimos los recursos en disputa de manera justa y por qué reconocemos la posesión previa.
Comportamientos moralmente buenos para todos
La investigación descubrió, primero, que estos siete comportamientos cooperativos siempre se consideraban moralmente buenos. Segundo, se encontraron ejemplos de la mayoría de estas actitudes éticas en la mayoría de las sociedades. Es más: no hubo ninguna sociedad en la que cualquiera de estos comportamientos se considerara moralmente malo. Y tercero, estas actitudes éticas se observaron con igual frecuencia en todos los continentes; no eran propiedad exclusiva de ‘Occidente’ o de cualquier otra región.
Así, entre los amhara de Etiopía, ignorar la obligación de parentesco se considera una desviación vergonzosa, que indica un carácter malvado. En Corea, existe una ética comunitaria igualitaria de asistencia mutua y cooperación entre vecinos y una fuerte solidaridad dentro del grupo.
La reciprocidad se observa en cada etapa de la vida de Garo, una etnia de Meghalaya, en La India, y tiene un lugar muy destacado en la estructura social de los valores de esta etnia. Entre los Maasai de Kenya, los que se aferran a las virtudes de los guerreros siguen siendo muy respetados.
Los Bemba, un pueblo bantú del África austral, exhiben un profundo sentido de respeto por la autoridad de los ancianos. La idea de justicia de los Kapauku en Indonesia se llama ‘uta-uta, media mitad, cuyo significado se acerca mucho a lo que llamamos equidad, según los investigadores. Y entre los tarahumaras, del norte de México, el respeto por la propiedad de otros es la clave de todas las relaciones interpersonales.
El estudio también detectó variaciones, ya que, aunque todas las sociedades parecían estar de acuerdo con las siete reglas morales básicas, variaban también en la forma en que las priorizaban o clasificaban.
El equipo ha desarrollado un nuevo cuestionario para recopilar datos sobre los valores morales modernos, y está investigando si la variación intercultural en los valores morales refleja la variación en el valor de la cooperación en diferentes condiciones sociales.
Según el coautor Harvey Whitehouse, los antropólogos se encuentran en una posición única para responder preguntas muy antiguas sobre los universales morales y el relativismo moral. “Nuestro estudio se basó en descripciones históricas de culturas de todo el mundo; estos datos se recopilaron antes e independientemente del desarrollo de las teorías que estábamos probando. Futuros trabajos podrán probar predicciones más precisas de la teoría mediante la recopilación de nuevos datos, incluso de manera más sistemática”.
“Esperamos que esta investigación ayude a promover el entendimiento mutuo entre personas de diferentes culturas. Apreciamos lo que tenemos en común, y cómo y por qué somos diferentes”, concluye Curry.