Un nuevo estudio desarrollado por científicos de la Universidad de Toho y del Instituto de Tecnología de Georgia ha logrado determinar que la atmósfera rica en oxígeno que posee la Tierra no durará para siempre. Aproximadamente en mil millones de años, los niveles de oxígeno descenderán abruptamente a partir del progresivo calentamiento del Sol, llevando a nuestro planeta a condiciones similares a las que tenía durante su formación, hace 2.400 millones de años.
La liberación de una mayor cantidad de energía desde un Sol envejecido y sobrecalentado será fatal para la atmósfera terrestre: al descenso en los niveles de oxígeno se sumará la ausencia de capa de ozono, una situación que expondrá a la Tierra a altos niveles de luz ultravioleta y calor del sol. Según una nota de prensa, esto eliminará por completo la vida terrestre y acuática.
En consecuencia, solamente podrá esperarse en ese momento la supervivencia de formas de vida microbianas. Bacterias primitivas que hoy se mantienen ocultas volverán a reinar en un planeta ya inhabitable para el hombre y para casi todas las expresiones vitales que conocemos actualmente. Es más: de acuerdo a la nueva investigación, publicada en la revista Nature Geoscience, la extinción de las plantas será fundamental en este proceso.
Muerte vegetal y disminución del oxígeno
Junto al calentamiento solar, los niveles de dióxido de carbono llegarán a valores mínimos, propiciando un escenario en el cual los organismos que dependen del proceso de fotosíntesis, como las plantas, perecerán indefectiblemente. Esta masiva muerte vegetal se convertirá en la principal causa de la fuerte caída en los valores de oxígeno, porque las especies vegetales dejarán de producirlo.
Aunque en la actualidad el oxígeno conforma alrededor del 21% de la atmósfera terrestre, creando un ambiente perfecto para el desarrollo de organismos grandes y complejos como el ser humano, estas características no existían en las etapas iniciales de formación del planeta y tampoco se observarán dentro de mil millones de años. Según estiman los científicos, una atmósfera rica en oxígeno solo será posible durante el 20 o el 30 por ciento de toda la historia de la Tierra como planeta habitado.
Para llevar adelante su estudio, los investigadores construyeron un modelo del sistema terrestre que simula los procesos climáticos y biogeoquímicos. Luego de ejecutar el modelo más de 400 mil veces, variando su parámetro y enfoque, los especialistas obtuvieron los datos exactos sobre los ciclos que llevarán a la irrupción de una atmósfera pobre en oxígeno, en un futuro lejano de la Tierra que ahora ya es posible definir con precisión.
Vida extraterrestre: más allá del oxígeno
Teniendo en cuenta que la presencia de oxígeno en la atmósfera es una de las biofirmas más buscadas para determinar la habitabilidad de planetas y exoplanetas, los científicos a cargo del nuevo estudio creen que sus hallazgos también podrán ser de utilidad en la búsqueda de vida extraterrestre.
Sin embargo, destacaron que se deben considerar también firmas biológicas adicionales en este tipo de esfuerzos científicos, aplicables a mundos débilmente oxigenados. De acuerdo a la opinión de estos expertos, las neblinas de hidrocarburos en la atmósfera de un planeta podrían convertirse en una biofirma consistente al buscar vida extraterrestre.
En consecuencia, esta investigación nos confirma por un lado que una atmósfera rica en oxígeno es una condición que la Tierra disfrutará por un plazo de tiempo concreto y, al mismo tiempo, nos muestra que la búsqueda de formas de vida fuera de nuestro planeta también debe enfocarse en la presencia de firmas biológicas que no dependan del oxígeno como su elemento primordial.