El desierto del Sahara se está expandiendo desde hace casi 100 años

Un estudio de la Universidad de Maryland advierte de que el desierto más grande del mundo se ha expandido alrededor de un 10 por ciento desde 1920.

El desierto del Sáhara se ha expandido alrededor de un 10 por ciento desde 1920, según un estudio de la Universidad de Maryland y publicado este jueves en «Journal of Climate» y que también advierte de que otros desiertos están sufriendo el mismo fenómeno.

Los desiertos generalmente se caracterizan por una precipitación promedio anual baja, de 100 milímetros por año o menos. Los investigadores analizaron los datos de lluvia registrados en toda África de 1920 a 2013 y descubrieron que el sáhara, que ocupa gran parte del norte del continente, se expandió en un 10 por ciento durante este período.

«Nuestros resultados son específicos para el sáhara, pero es probable que tengan implicaciones para el resto de desiertos del mundo», señaló Sumant Nigam, profesor de Ciencias Atmosféricas y Oceánicas en la Universidad de Maryland y autor principal del estudio.

Los resultados del estudio sugieren que el cambio climático causado por los humanos, así como los ciclos climáticos naturales como la Oscilación Multidecadal Atlántica (AMO), causaron la expansión del desierto. La AMO es fenómeno oceánico del Atlántico que se produce en su parte norte y según el cual las temperaturas oceánicas siguen un ciclo de una duración total de unos 70 años. A lo largo de este periodo se produce un máximo y un mínimo de temperaturas. El patrón geográfico de expansión varió de estación en estación, y las diferencias de tempratura más notables se dieron en los límites norte y sur del sáhara.

«Los desiertos generalmente se forman en los subtrópicos debido a la circulación de Hadley, a través de la cual el aire se eleva en el ecuador y desciende en los subtrópicos», explicó Nigam. «Es probable que el cambio climático ensanche la circulación de Hadley, causando el avance hacia el norte de los desiertos subtropicales. Sin embargo, el avance del sáhara hacia el sur sugiere que también están influyendo otros fenómenos, incluidos los ciclos climáticos como el AMO».

El sáhara es el desierto de clima cálido más grande del mundo, aproximadamente del mismo tamaño que los Estados Unidos. Como todos los desiertos, los límites del sáhara fluctúan con las estaciones, expandiéndose en el invierno seco y contrayéndose durante el verano más húmedo.

El límite sur del sáhara colinda con el Sahel, la zona de transición semiárida que se extiende entre el Sáhara y las fértiles sabanas más al sur. El Sáhara se expande a medida que el Sahel retrocede, afectando los frágiles ecosistemas de praderas y las sociedades humanas de la región. El Lago Chad, que se encuentra en el centro de esta zona de transición conflictiva por el clima, sirve como un indicador de las condiciones cambiantes en el Sahel.

«La cuenca del Chad cae en la región donde el Sáhara se ha deslizado hacia el sur. Y el lago se está secando», explicó Nigam. «Es una huella muy visible de la reducción de las precipitaciones no solo a nivel local, sino en toda la región».

Varios ciclos climáticos pueden influir en las precipitaciones en el Sáhara y el Sahel. Las fases cálidas del AMO están relacionadas con el aumento de las precipitaciones en el Sahel, mientras que la reducción de lluvias se relacionan con las fases frías. Por ejemplo, el la sequía que sufrió el Sahel desde la década de 1950 hasta la década de 1980 se ha atribuido a una de esas fases frías. Por otro lado, la Oscilación Decenal del Pacífico (PDO), marcada por las fluctuaciones de temperatura en el Océano Pacífico norte en una escala de 40 a 60 años, también influyen.

«Efecto devastador»

Para identificar los efectos del cambio climático causado por los seres humanos, los investigadores utilizaron métodos estadísticos para eliminar los efectos del AMO y PDO sobre la variabilidad de la lluvia durante el período de 1920 a 2013. Los investigadores concluyeron que estos ciclos climáticos naturales representaron aproximadamente dos tercios de la expansión total observada del Sáhara. El tercio restante se puede atribuir al cambio climático, pero los autores señalan que se necesitan registros más largos que se extiendan a lo largo de varios ciclos climáticos para llegar a conclusiones más definitivas.

Los resultados del estudio tienen implicaciones de largo alcance para el futuro del sáhara, así como para otros desiertos subtropicales de todo el mundo. A medida que la población mundial crece, una reducción de la tierra cultivable con lluvias necesarias para apoyar esos cultivos podría tener consecuencias devastadoras.

«Las tendencias en África de veranos calurosos cada vez más cálidos y lluviosos se relacionan con factores que incluyen el aumento de gases de efecto invernadero y aerosoles en la atmósfera», advirtió Ming Cai, director de programa de la División de Ciencias Atmosféricas y Geospaciales de la Fundación Nacional de Ciencias, que financió la investigación. «Estas tendencias también tienen un efecto devastador en las vidas de los africanos, que dependen de economías basadas en la agricultura».

ABC