En marzo pasado, científicos del Instituto Scripps de Oceanografía anunciaron que la medición promedio de dióxido de carbono en febrero había sido de 411,66 partes por millón, lo que significa que el registro actual es más de 3 puntos superior al de hace tres meses.
“Esta es la primera vez en la historia de la humanidad que la atmósfera de nuestro planeta ha tenido más de 415 ppm de CO2”, anunció en twitter el experto climático Eric Holthaus, basándose en los datos registrados y presentados por el Instituto Scripps de Oceanografía en la Universidad de California, en San Diego.
Según el director del programa Scripps CO2, Ralph Keeling, “el aumento con respecto al año pasado probablemente será de alrededor de tres partes por millón, mientras que el promedio reciente ha sido de 2.5 ppm. Es probable que estemos viendo el efecto de las condiciones leves de El Niño sobre el uso continuo de combustibles fósiles”.
Lo cierto es que no ha habido tanto dióxido de carbono en la atmósfera de nuestro planeta desde antes de que los coches comenzaran a recorrer las carreteras hace un siglo, o antes de que la agricultura se desarrollara hace 10.000 años, e incluso antes de que los humanos modernos evolucionaran, hace más de un millón de años.
Este dato significa que hemos llegado no solo a una nueva fase de la historia de nuestra civilización, sino también a una nueva fase de la historia de nuestra especie, según los expertos.
Todos los récords
El último registro señala que se han superado todos los récords de los registros anteriores de concentraciones de CO2 en la atmósfera terrestre desde los inicios de nuestra civilización.
A fines de 2018, el observatorio atmosférico de NOAA en Mauna Loa registró el cuarto crecimiento anual más alto en la concentración de dióxido de carbono atmosférico (CO 2) en 60 años de mantenimiento de registros.
De 2016 a 2017, el promedio mundial de CO2 aumentó en 2.3 ppm, el sexto aumento consecutivo de más de 2 ppm, según los investigadores de Scripps. Antes de 2012, los aumentos consecutivos de 2 ppm o más habían ocurrido solo dos veces.
En 1910, el CO2 atmosférico se mantuvo en 300 ppm, más alto de lo que había sido por lo menos durante unos 800,000 años, pero aumentó en más de 100 ppm en este siglo a medida que los niveles de contaminación se dispararon.
La última vez que en la Tierra su superaron las 400 ppm, había árboles en el Polo Sur, destaca Science Alert. Las mediciones del gas de efecto invernadero comenzaron en 1959.
Estos datos se corresponden con las predicciones de los científicos de que el planeta se está arrastrando hacia puntos de inflexión peligrosos e irreversibles, y resaltan el peligro que supone retrasar la transición a una economía libre de carbono, según los expertos.
Los niveles de CO2 continúan creciendo a una tasa récord de todos los tiempos porque las emisiones de carbón, petróleo y gas natural también se encuentran en niveles récord.
Lo realmente preocupante es que las emisiones actuales de COS seguirán atrapando el calor en la atmósfera durante de miles de años.
La liberación de CO2 y otros gases de efecto invernadero ya ha provocado un aumento de 1ºC en las temperaturas globales, y es probable que estemos atrapados en un nuevo aumento, si los gobiernos no toman medidas inmediatas, según los expertos.