Descubren un lago de lava oculto al norte de la Antártida
July 6, 2019 El Mundo , NoticiasImágenes por satélite han revelado la existencia de una piscina de roca fundida en la isla de Saunders, un remoto lugar apenas explorado.
Cuando pensamos en un volcán quizás nos imaginamos una erupción o una burbujeante piscina de lava. Sin embargo, en relación con esto último, la realidad es que la lava de los volcanes suele enfriarse y solidificarse más o menos rápidamente. De hecho, en todo el mundo solo se conocen siete piscinas de lava. Se encuentran en volcanes más o menos tranquilos cuyas propiedades favorecen la existencia de lava durante largos periodos de tiempo.
Por eso es sorprendente que los científicos acaben de anunciar el hallazgo de una piscina de lava que había pasado desapercibida hasta ahora. El hallazgo, que se ha publicado en Volcanology and Geothermal Research, se ha producido en la pequeña isla de Saunders, en el archipiélago de las islas Sandwich del Sur, a 1.600 kilómetros al norte de los límites del mar de Weddell, en el océano Atlántico Sur.
Científicos del University College de Londres y del British Antarctic Survey (BAS) analizaron imágenes por satélite de la isla tomadas entre los años 2003 y 2018, y descubrieron que la cumbre del Monte Miguel, que normalmente está oculta por las nubes, contiene en su interior un lago de lava de 90 a 215 metros de diámetro. Según las medidas hechas por satélite, la lava está a una temperatura de 989 a 1.279 grados centígrados.
Según ha dicho en un comunicado Danielle Gray, director de la investigación, la isla es «de acceso extremadamente difícil», por lo que, «sin imágenes en alta resolución de satélite habría sido un reto aprender más sobre este impresionante fenómeno geológico».
La isla de Saunders es parte de una remota cadena de volcanes que forman el archipiélago de las Islas Sandwich del Sur. Este es parte del territorio británico de ultramar que también comprende las Islas Georgias del Sur. Según los autores de este estudio, esta ha sido visitada en muy raras ocasiones, y nunca nadie ha ascendido a la cumbre.
El hallazgo se ha producido porque en 2001 los científicos del BAS detectaron una anomalía térmica sobre el volcán, sin que se pudiera averiguar su origen.
En esta ocasión, las imágenes en alta resolución en longitudes de onda destinadas a captar la actividad geotermal detectaron la presencia de un lago de lava, aunque no se ha podido determinar a qué distancia está del borde del volcán. Gracias a los análisis, se ha concluido que, probablemente, el lago ha existido al menos desde 2003.
Las otras «piscinas» de lava
En la actualidad se conocen siete lagos de lava permanentes en el planeta: el volcán de Nyiragongo, en República Democrática del Congo; Erta Ale, en Etiopía; el Monte Érebo en el mar de Ross; el Monte Yasur y la isla de Ambrym, en Vanuatu; el Kilauea, en Hawái y la caldera de Masaya, en Nicaragua.
Los geólogos averiguaron que solo existen lagos de lava líquida en un puñado de sitios, entre los 1.500 volcanes de la Tierra, porque solo en algunos puntos los gases eruptivos, vapor de agua, dióxido de azufre o dióxido de carbono, pueden mantener la lava lo suficientemente caliente como para que no se solidifique.
Los investigadores creen que el próximo paso es que un avión sobrevuele la isla para tomar fotografías, pero han comentado que la isla es tan remota y que hay tan poco tráfico marítimo por la región, que esto no ocurrirá hasta dentro de un tiempo considerable.