Científicos encuentran un enorme planeta errante a las afueras del sistema solar

Un grupo de científicos encontró un planeta errante que es 12 veces más grande que Júpiter y no orbita ninguna estrella. El nuevo cuerpo celeste se encuentra a una distancia de 20 años luz de la Tierra.

CCO / Pixabay

El objeto, que recibió el nombre de SIMP J01365663+0933473, fue localizado en 2016 y hasta ahora se creía que se trataba de una enana marrón. No obstante, un reciente estudio demostró que se trata de un gigantesco planeta con características muy peculiares.

¿Qué es una enana marrón?

Las enanas marrones son objetos enormes que superan en su tamaño a los planetas, pero siguen siendo considerablemente menores que las estrellas. Debido a su reducido tamaño, no son capaces de mantener las mismas reacciones nucleares que las estrellas.

Sus reacciones termonucleares se terminan en las etapas iniciales de su vida al quemar todo el combustible y se convierten en objetos similares a planetas. Aún se desconocen muchas cosas sobre estos objetos espaciales, también conocidos como ‘estrellas fallidas’, puesto que fueron observados por primera vez en 1995.

¿Por qué el nuevo planeta no es una enana marrón?

Las enanas marrones son difíciles de categorizar porque son demasiado grandes para ser planetas, si bien no lo suficientemente grandes para ser estrellas. Uno de los criterios para diferenciarlas de los planetas es su masa: debe oscilar entre 13 y 80 masas de Júpiter.

Planeta errante SIMP J01365663+0933473, ilustración artística / © FOTO: PUBLIC DOMAIN / CALTECH/CHUCK CARTER; NRAO/AUI/NSF

El planeta errante en cuestión tiene una masa de 12,7 Júpiteres, de manera que está al borde de ser un planeta. Otra cosa que lo diferencia de una enana marrón es su edad, puesto que el planeta es demasiado joven para ser una ‘estrella fallida’, indica la autora del estudio, Melodie Kao, astrónoma en la Universidad Estatal de Arizona.

Importancia del descubrimiento

El nuevo planeta tiene un campo magnético que es 200 veces más fuerte que el de Júpiter. Además, es la primera vez que se logra medir el campo magnético de un objeto planetario fuera del sistema solar, indica Melodie Kao.

Así, la científica indica que el nuevo planeta puede contribuir a entender mejor los procesos magnéticos tanto de planetas como estrellas.

Otro dato curioso sobre el nuevo cuerpo celeste y algunas enanas marrones es el hecho de que tienen auroras boreales a pesar de que no haya viento solar que las provoque. Así que aún no queda claro cómo se originan.

La signatura de radio de estas auroras fue la que permitió detectar estos objetos espaciales. Kao destacó que los mecanismos dinamomagnéticos de este objeto pueden explicar cómo funcionan los mismos mecanismos en planetas fuera de nuestro sistema solar.

Además, los científicos señalan que su estudio demuestra que las emisiones de radio de las auroras pueden usarse para descubrir nuevos planetas fuera de nuestro sistema solar, incluidos otros planetas errantes que no están atados a una estrella.

Sputnik