Científicas israelíes logran hacer germinar dátiles con semillas de hace 2.000 años

Dos científicas reviven la palmera del dátil de Judea, venerada en los textos antiguos, usando semillas encontradas en yacimientos arqueológicos, ahora la planta es modelo para la investigación en la longevidad de simientes.

Enotovyj / Pixabay

La planta del dátil de Judea, perdida desde hace por lo menos un milenio, ha vuelto a crecer en el kibutz Ketura, en el sur de Israel, gracias a las investigaciones de una etnobotánica y una horticultora.

La doctora Sarah Sallon, etnobotánica del Centro Médico Hadasa, y su equipo, cribaron entre miles de semillas con el propósito de hacerlas germinar y revivir plantas de dátil extintas que habían crecido en la región de Judea, para aprender acerca de sus cualidades.

Las semillas originalmente provienen del descubrimiento que hizo de ellas el legendario arqueólogo israelí Yigal Yadin en la década de los 60. Algunas de las simientes fueron encontradas bajo los escombros en las excavaciones que estaba llevando a cabo en Masada. Otras fueron encontradas en cuevas de las cercanías del mar Muerto.

Sallon le entregó las semillas a la doctora Elaine Solowey, jefa del Centro de agricultura sostenible en el Instituto de estudios ambientales en el kibutz Ketura, para que las hiciese germinar. Solowey sumergió 34 de los especímenes en agua enzimática y fertilizador líquido y las plantó en tierra estéril de maceta.

“Me llevó un tiempo saber cómo hacerlo porque solo tienes una oportunidad con cada semilla”, declaró la doctora Solowey en un comunicado del Ministerio de Exteriores de Israel.

Las plantas tardaron 15 años en crecer. Las dátiles antiguos resultaron ser significativamente más grandes que las variedades modernas, coincidiendo con los relatos históricos del tamaño del dátil de Judea.

Para comprobar que las semillas eran antiguas el equipo practicó la técnica de la datación de carbono a las cáscaras de las semillas pegadas a la raíz de las plantas que habían germinado con éxito. El resultado reveló que las semillas tenían entre 2.200 y 1.800 años de antigüedad.Los científicos israelíes están tratando de encontrar una manera de usar el cultivo de tejidos y crear cientos de miles de réplicas exactas de Hannah, la palmera de dátil germinada de una semilla de hace dos milenios.

Una planta especial

“El árbol de dátil de Judea era conocido por tener propiedades medicinales muy efectivas”, comentó la etnobotánica. “Era usado contra infecciones, depresión y como un tónico general para hacer que te sintieras mejor”.

Y estudios modernos corroboran las propiedades especiales del dátil, demostrando que ayudan al proceso digestivo, a reducir el colesterol, mejoran la memoria, aumentan la producción de sangre, aparte de poseer propiedades afrodisíacas y fortalecer el sistema nervioso.

Nombres bíblicos

Para los judíos los dátiles aparecen cargados de propiedades y de simbolismos, pero también para romanos y griegos; en ambas culturas simbolizaban belleza, fertilidad, paz y victoria.

Las científicas bautizaron a las primeras semillas antiguas que lograron hacer germinar como Matusalén, en referencia a la persona más anciana citada en la Biblia. Las semillas Matusalén han sido designadas por el Libro Guiness de los Records como la semilla más vieja que ha sido cultivada nunca.Las otras palmeras de dátil que han germinado de las mismas semillas se llaman Adán, Hannah, Judith, Jonah, Boaz y Uriel.

Actualmente existe una cosecha de 111 plantas de dátil de Judea. Solo las doctoras Sallon, Solowey, junto a algunos científicos y miembros del kibutz Ketura, han probado muestras de estos dátiles, y dicen de ellos que no son tan dulces como los actuales, que no son nada pegajosos y que dejan un regusto agradable a miel. La mayoría de los especímenes se reservan para propósitos científicos.

Sputnik