Beneficios de tener gato
Los gatos pueden hacer mucho por tu salud, desde protegerte contra el estrés y enfermedades cardiovasculares provocadas por él, hasta ayudarte a sobrellevar una pérdida o no sentirte solo nunca más.
A pesar de tener fama de ariscos, traidores y demasiado independientes, la complicidad entre gatos y humanos es indudable. Ya en el Antiguo Egipto, los felinos eran representados incluso como deidades. Y es que, tener un gato cerca, puede ser sorprendentemente beneficioso para tu salud.
Su carácter tranquilo y su aspecto inocente transmiten una sensación de calma inexplicable. Pero además, su compañía tiene visibles beneficios para nuestra salud: de ahí nace la idea de que los gatos participen en procesos de terapia, conocida como “gatoterapia”.
Son muchas las investigaciones científicas que avalan la “gatoterapia”, esta vertiente terapéutica que consiste en, simplemente, permanecer en compañía de uno o varios gatos. Es el caso de un estudio médico de 2008 realizado en Estados Unidos en un período de 20 años y presentado en la Conferencia Internacional de la American Stroke Association (ASA), el cual indica que los dueños de gatos tienen menos riesgos de desarrollar accidentes cerebrovasculares.
El ronroneo de los felinos es uno de los factores más importantes y reconocidos de la terapia. Su frecuencia oscila entre los 25 y los 50 hercios, la misma que se usa en las terapias con pacientes con lesiones óseas. Sin embargo, no ha quedado demostrado que el ronroneo ayude en las lesiones óseas ajenas al gato pero sí aumentaría la densidad de sus propios huesos. Lo que sí se ha comprobado es que el ronroneo ayuda a bajar la presión arterial. De esta forma, tener a un gato encima ronroneando nos ayuda a relajarnos, procesar las emociones y aceptar determinadas situaciones. Esto es posible, en gran parte, por la aparición de endorfinas. La mezcla de éstas produce la estimulación de la activación celular y refuerza el sistema inmunológico.
Los efectos del ronroneo en las personas suponen una terapia muy efectiva en pacientes con trastornos psicológicos como la depresión, la ansiedad o incluso el autismo.
Además, la compañía del gato tiene un efecto psicológico muy importante. Su presencia puede despertarnos sentimientos de protección y de sentirnos necesitados, los cuales nos fortalecen. A continuación te contamos más beneficios que tiene poner un minino en tu vida.
Igual que ocurre con los perros, tener gato disminuye los niveles de estrés. Determinadas investigaciones han descubierto que este hecho se relaciona con el riesgo de contraer enfermedades cardiovasculares. Según un estudio realizado por investigadores del Instituto Stroke de la Universidad de Minnesota, las personas que conviven con gatos tienen un 30% menos de probabilidad de morir de un ataque al corazón.
La interacción social de los niños que sufren autismo mejora significativamente cuando están cerca de mascotas. Esta es la conclusión a la que llegaron investigadores de la Universidad de Missouri. La mitad de las familias que participaron en el estudio tenían gatos.
El estudio realizado en el Instituto Stroke de la Universidad de Minnesota mostró que los gatos ayudaban a aliviar el estrés y a bajar la tensión arterial.
Múltiples estudios realizados en Suecia y Finlandia mostraron que la exposición de un niño a un gato o un perro durante su infancia puede ayudarlo a desarrollar inmunidad, haciendo que el pequeño tenga menos probabilidades de, en un futuro, desarrollar alergia a las mascotas.
Los bebés y niños pequeños que presentan más riesgo de desarrollar asma en la vida adulta parecen disfrutar de una disminución de esas probabilidades si crecen con un gato en casa. La excepción se presenta si la madre tiene alergia a los gatos.
Un estudio llevado a cabo en Reino Unido concluyó que las personas que se acababan de quedar viudas mostraron menos síntomas físicos como el llanto si poseían mascota. Investigadores de la Universidad de Miami declararon que los dueños de mascotas probablemente se sienten menos solos porque los animales les sirven de apoyo social. De hecho, ¡hay quien habla más con su gato que con otras personas!
La investigación liderada por el Dr. Juner Nicolls mostró que las mujeres tenían más probabilidades de sentirse atraídas por hombres con mascotas. El 90% de las mujeres solteras estudiadas encontraban a los hombres dueños de gatos más agradables y cariñosos.
Un estudio realizado por la Universidad de Indiana Bloomington sobre 7.000 personas relacionó ver vídeos de gatos con un aumento de la energía de los espectadores y de sus emociones positivas. El acto de ver vídeos de mininos también disminuía los sentimientos negativos. “Incluso si están viendo vídeos de gatos en YouTube mientras posponen tareas o cuando deberían estar trabajando, el beneficio emocional puede ayudar a las personas a asumir tareas difíciles luego”, apunta Jessica Myrick, profesora asistente del estudio.
El estar acompañado por un gato mejora el ánimo y sirve de distracción positiva para aquellas personas que sufren depresión. Convivir con una mascota también ayuda a establecer rutinas y ser responsable. Aunque todas las mascotas pueden ayudar en caso de depresión, los gatos, por ser animales especialmente tranquilos y pacíficos, son más proclives a transmitir esos sentimientos a las personas.
Los efectos beneficiosos de los gatos ya se están empleando en lugares con pacientes enfermos, con una salud delicada o en situaciones desfavorables. Es el caso de geriátricos y hospitales.
