Amaneceres con todos los planetas
Este fin de semana, justo antes de los amaneceres, será visible una bella alineación astronómica: Júpiter, Saturno, Marte, Venus, Mercurio y el fino filo de la luna menguante se mostrarán visibles sobre la línea de la eclíptica.
Recreación artística del Sistema Solar
ECLÍPTICA Y ZODÍACO
La eclíptica es la línea imaginaria de la bóveda celeste por donde se mueve el Sol en su movimiento aparente a lo largo del año, cuando lo miramos desde la Tierra. La eclíptica atraviesa las constelaciones del Zodíaco que fueron descritas en la antigüedad y que nos resultan tan familiares.
Las órbitas de los otros planetas del sistema solar están poco inclinadas respecto a la órbita de la Tierra. Gracias a ello, las posiciones aparentes de esos 7 planetas siempre se encuentran cercanas a la eclíptica. Y algo parecido sucede con la Luna. Así que, aunque todos estos astros se encuentren a distancias muy diferentes, cada cierto tiempo se producen conjunciones y alineamientos entre ellos que pueden resultar espectaculares.
El cielo del domingo 5 de julio a las 6 horasRB / Stellarium
CINCO PLANETAS A SIMPLE VISTA
Uno de estos alineamientos tendrá lugar durante los amaneceres de este fin de semana. A eso de las 6 horas de la mañana (hora peninsular), mirando hacia el este podremos divisar, por orden, según levantamos la vista sobre el horizonte y sobre una misma línea, la Luna, Mercurio, Venus y Marte. Siguiendo la misma línea hacia el Oeste, ya muy cerca del horizonte, se encontrarán Saturno y el brillante Júpiter.
CUADRO DE TEXTO
Ese día el pequeño Mercurio se encontrará, como de costumbre, muy bajo sobre el horizonte, y todavía no está muy brillante, pero el fino arco del disco lunar ayudará a localizarlo, pues ambos astros se encuentran a unos tres grados de distancia. Eso sí, hay que buscar un horizonte bien despejado, y no perder el momento pues, muy rápidamente, la ascensión del Sol iluminará el cielo a baja elevación y el pequeño planeta quedará enmascarado.
Moviendo la vista hacia el sur nos encontramos con Venus, el más brillante de todos los planetas visibles en este momento. Venus se encuentra ahora 1,7 veces más lejos que el Sol, en sus proximidades podemos ver a la brillante estrella Aldebarán.
Hacia el sureste se encuentra Marte, el más alto en el horizonte a esta hora. Aunque en estos momentos no está muy brillante, su brillo cobrizo es inconfundible. El planeta rojo se encuentra ahora 2,6 veces más lejos que el Sol.
Llegando al horizonte suroeste tenemos visibles a Saturno y a Júpiter. El planeta de los anillos es ahora 15 veces menos brillante que el gigante Júpiter, pero, aun así, sigue siendo uno de los astros más brillantes del cielo nocturno. Los dos planetas gigantes permanecen visibles durante toda la noche. Ambos están muy lejos de la Tierra: Júpiter 4,4 veces y Saturno 9 veces más lejos que el Sol. Pero los dos están muy brillantes por estar situados actualmente en dirección opuesta al astro rey, muy bien iluminados. De hecho, Júpiter ha estado exactamente en oposición el día 14 de julio y Saturno lo estará el día 20. Estos son los mejores momentos, pues, para observar los dos planetas gigantes. Con un pequeño telescopio se pueden apreciar fácilmente sus lunas, la gran mancha de Júpiter y los anillos de Saturno.
Cabe mencionar que Urano y Neptuno también se encuentran sobre el horizonte, cada uno de ellos a ambos lados de Marte. Sin embargo, Urano se encuentra 20 veces más lejos que el Sol y Neptuno, casi 30 veces, por lo que estos planetas no son visibles al ojo desnudo.
PLANETAS Y LOS DÍAS DE LA SEMANA
Los seis astros que vemos este fin de semana han estado presentes en todas las culturas desde la antigüedad. La Luna y estos planetas visibles a simple vista son los que dieron nombre a los días de la semana: de la Luna surgió lunes; de Marte, martes; de Mercurio, miércoles; de Júpiter, jueves; de Venus, viernes; y de Saturno, sábado (el domingo tiene origen cristiano: dies Dominica, día del Señor).
La alineación de estos cinco astros (Luna, Mercurio, Venus, Marte, Saturno y Júpiter) en la bóveda celeste, el sol naciente y la Tierra bajo nuestros pies, todo ello nos recuerda que vivimos en un sistema solar repleto de maravillas.
