Chile recibe los primeros espejos del ELT, el futuro telescopio más grande del mundo

Cuando inicie operaciones en 2028, el ELT del ESO recopilará más luz que la suma de todos los telescopios grandes contemporáneos.

Representación artística sobre cómo lucirá el Extremely Large Telescope en Chile. / ESO

El Observatorio Europeo Austral (ESO) está llevando a cabo un proyecto que tiene el potencial de revolucionar el estudio del universo. En un futuro próximo, el desierto de Atacama, Chile, albergará el telescopio más grande de la historia. Su espejo primario medirá 40 metros de diámetro y estará compuesto por 800 paneles seccionados de vitrocerámica. Los primeros espejos más pequeños ya están llegando al suelo sudamericano, donde serán almacenados hasta la fase de instalación, prevista antes de que finalice la década.

En enero, los primeros 18 espejos llegaron al Cerro Armazones, en el desierto chileno. Viajaron en barco desde Francia, embalados en cajas especiales, atravesando 10 mil kilómetros de separación. Una vez que estén ensamblados bajo la titánica estructura, su objetivo será identificar signos de vida más allá del sistema solar e indagar en la historia antigua del Universo.

Así es el Extremely Large Telescope del ESO

La ESO ha apodado a su Extremely Large Telescope (ELT) como el “ojo más grande del mundo para mirar el cielo”. Según la página oficial del observatorio, el instrumento de medición infrarrojo reunirá más luz que la suma de todos los grandes telescopios que existen actualmente en el planeta. La presentación del ELT afirma que los 800 segmentos unificados serán 100 millones de veces más sensibles a la luz que el ojo humano.

La edificación del ELT no presenta contratiempos. El proyecto fue aprobado en 2012 y desde entonces la instalación se construye en la cima de una montaña, a 3 mil metros sobre el nivel del mar. Entre 2023 y 2025, se terminará la cúpula que protegerá el telescopio. En 2027 se realizará la primera prueba, también llamada ‘primera luz’, y finalmente en 2028 iniciará operaciones.

Todo el conjunto de la ELT medirá casi 90 metros de diámetro.

Los 40 metros de diámetro del espejo del ELT representan un salto considerable en cuanto a las capacidades actuales de observación científica. El telescopio más grande del ESO es el Very Large Telescope, con un espejo principal de 8.2 metros de diámetro. El Telescopio Canarias en La Palma, España, tiene un diámetro de 10.4 metros, y el Telescopio Espacial James Webb cuenta con un un espejo primario de 6.5 metros.

Con los observatorios disponibles, la comunidad científica ha llegado a importantes descubrimientos como los agujeros negros más distantes en el espacio-tiempo, las estrellas Kaijú, los misteriosos objetos JUMBO y algunas fábricas de estrellas al centro de la Vía Láctea.

Una vez instalado, el ELT se dedicará a estudiar planetas con masas pequeñas situados en zonas habitables. Los astrónomos esperan obtener fotografías directas de exoplanetas y realizar estudios de espectroscopia de alta resolución que ayuden a comprender sus atmósferas. También apuntará a los sistemas planetarios más lejanos en la galaxia y a discos protoplanetarios ya identificados.

“Espero que con el ELT podamos lograr comprender cuál es nuestro lugar en el Universo en términos concretos, y tal vez podamos responder si estamos solos o no en el Universo”, expresó Amina Helmi, miembro del Consejo de ESO y profesora titular del Instituto Astronómico Kapteyn, en Países Bajos.

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