Del capullo a la seda: los secretos de la sericicultura

El gusano de seda, una especie totalmente domesticada, produce los capullos a partir de los cuales se obtiene esta preciada fibra.

Gusanos de seda

Los gusanos de seda (Bombyx mori L.) son insectos, y tienen la particularidad de ser la especie con mayor grado de domesticación: necesitan que el ser humano les proporcione alimento y cuidado. Por eso, la cría se realiza en recintos cerrados.

Cultivo de moreras

Los gusanos de seda se alimentan exclusivamente de hojas de morera. La morera (Morus sp.) fue introducida en América Latina y el Caribe junto con el gusano de seda. Su cultivo es posible en zonas tropicales y áridas. En la imagen, cultivador de moreras en Colombia.

Capullos de seda

Aquí vemos los capullos de seda junto a los denominados “bosques de plástico”, estructuras provistas ex profeso, para facilitar la adherencia de los capullos. Cada gusano completa su capullo en solo tres días.

Gusanos de seda trabajando

En la imagen pueden verse los capullos de seda que van adhiriéndose a los denominados “bosques de plástico”, alrededor de los cuales se fijan para completar su labor. Estos “bosques” constituyen el soporte adecuado que les permite a los gusanos construir sus capullos.

Los secretos de la clasificación de los capullos

Existen dos categorías de capullos. Los capullos de primera calidad se destinan al devanado de filamento contínuo. Los capullos de segunda calidad, capullos perforados y la borra (fibra de seda laxa que recubre el capullo) son destinados a la elaboración de seda cortada o seda schappé. En Italia, por su suavidad, la borra solía utilizarse para confeccionar los escarpines de los bebés.

Los secretos de la clasificación de los capullos

Existen dos categorías de capullos. Los capullos de primera calidad se destinan al devanado de filamento contínuo. Los capullos de segunda calidad, capullos perforados y la borra (fibra de seda laxa que recubre el capullo) son destinados a la elaboración de seda cortada o seda schappé. En Italia, por su suavidad, la borra solía utilizarse para confeccionar los escarpines de los bebés.

El hilado de la seda: precisión y paciencia

El hilo del capullo es devanado de una manera parecida a como se haría con una madeja de lana. En la foto, una artesana de la seda en Argentina realiza la tarea de forma manual. Como particularidad, la seda, junto a la fibra de las arañas, es de los elementos más resistentes de la naturaleza. Es incluso más fuerte que el acero (en una proporción de peso equivalente).

El teñido de los capullos

La materia prima para los teñidos se puede obtener de diversas fuentes: vegetales y animales (insectos, moluscos). Las más usadas son las provenientes del reino vegetal. Se puede trabajar con cortezas, hojas, raíces, musgos y líquenes, frutos, cáscaras, semillas y flores.

DW