Al descubierto el secreto mejor guardado de las momias del Cerro Esmeralda

Existe la creencia de que cualquier persona que profane la tumba de una momia morirá pronto. Un equipo de investigadores chilenos llegó a la conclusión de que esta superstición puede tener una explicación científica.

CC BY-SA 3.0 / Jason Quinn / The replica of the Plomo Mummy on display at the Museo Nacional de Historia Natural in Santiago, Chile.

El artículo correspondiente ha sido publicado en la revista especializada Archaeometry.

Durante el estudio, los investigadores de varias universidades chilenas analizaron los restos y la ropa de dos momias incas halladas en 1976 en un cementerio inca ubicado en el Cerro Esmeralda, al norte de Chile.

Al llevar a cabo un análisis químico de los vestidos de las momias, los científicos concluyeron que sus tejidos contienen abundantes cantidades de cinabrio, un mineral compuesto en un 85% por mercurio, una sustancia tóxica. Según sugieren los investigadores, la ropa envenenada probablemente sirvió para proteger el entierro —en el que también se encontraban más de un centenar de objetos— de los profanadores de tumbas.

Estas momias —una niña de nueve años y una joven de 18 años— son producto del sacrificio ritual ‘capac cocha’ (obligación real, en español), uno de los más importantes del imperio inca.

“Los sacrificios de capac cocha se realizaban en conmemoración de acontecimientos históricos en la vida del emperador inca o en respuesta a catástrofes naturales”, explicó el encargado del estudio, Bernardo Arriaza, de la Universidad de Tarapacá.

Tras el sacrificio —que supuestamente tuvo lugar entre los años 1399 y 1475—, los cadáveres de las niñas fueron momificados y adornados.

Sputnik