Día Internacional de la Solidaridad
August 31, 2019 Bienestar , NoticiasEl 31 de agosto de cada año se celebra el Día Internacional de la Solidaridad.
Se eligió esta fecha en honor al movimiento social polaco Solidaridad, que fue representado en 1980 por el gremio sindical ‘Solidarność’. Este movimiento fue uno de los tantos responsables de la caída del muro de Berlín. Es más uno de sus dirigentes, Lech Walesa, fue consagrado con el Premio Nobel de la Paz gracias a que promovió los ideales de la solidaridad no solo en su país de origen sino por todo el planeta.
El objetivo principal del Día Internacional de la Solidaridad
El propósito de este día no ha variado mucho desde que se fundara el partido sindical. En realidad, se basa en un principio básico que es el de la ayuda mutua o el ser solidarios con los otros. Según el mismo Walesa, solo en la medida en que todos nos ayudemos y trabajemos por una causa común que proporcione el mayor bienestar a todos, en esa misma medida viviremos en un mundo mucho más pacífico, enriquecedor y próspero para cada nación, pueblo o individuo.
¿Cómo celebrar el Día Internacional de la Solidaridad?
Para celebrar este día, hay primero que ser conscientes de cuáles son las verdaderas necesidades de nuestra comunidad, ciudad o país. Según la misma ONU, este día no posee un programa fijo, cada país o pueblo, es libre de celebrarlo como mejor se adapte a las necesidades de sus habitantes. Lo que sí no se debe perder de vista es que toda actividad debe reflejar un espíritu solidario propiciado por el deseo del bien común.
Entre las actividades que más se suelen realizar a lo largo y ancho del mundo están las siguientes:
- Dar de comer a los más desfavorecidos.
- Recolectar ropa para los pobres.
- Realizar actividades de recreación y esparcimiento en zonas públicas.
- Ayudar a los niños y las personas de la tercera edad de la zona en la que se vive.
- Realizar jornadas de salud completamente gratuitas.
Realmente celebrar este día es bastante sencillo, solo basta con interesarse un poco en las personas del entorno y plantear alguna actividad que brinde una solución a sus necesidades más básicas. Quizás la respuesta sea simplemente hacer una gran comilona en el medio de la calle principal de nuestro barrio.